“La reducción de daños salva vidas”: directora de Política de Drogas

La historiadora Gloria Miranda, quien es la directora de Política de Drogas del Ministerio de Justicia, conversó con La W sobre la lucha antinarcóticos en Colombia.

En cuanto a los sectores políticos y de opinión que advierten la necesidad de replantear la lucha contra las drogas, al considerar que es una pelea fallida, Miranda aseguró que en la Comisión de Estupefacientes de Naciones Unidas en Viena se cuestionó el status quo de esta estrategia.

Según la directora, por primera vez sucedieron dos hechos históricos: “Uno, se menciona la reducción de riesgos y daños en una resolución, que además se somete a votación –cosa que nunca pasa porque siempre partimos del consenso– y dos, Colombia cuestiona el régimen internacional de fiscalización de drogas”.

En ese sentido, Miranda mencionó que, después de 568 billones de pesos invertidos en la lucha contra las drogas a nivel Colombia, “tenemos un aumento en el consumo, en la producción, en la violencia y en el poder adquisitivo de las estructuras dedicadas al narcotráfico”.

Por eso, la gran pregunta que la directora plantea ante esta evidencia es la siguiente: “¿Qué estamos haciendo? ¿Vamos a seguir haciendo lo mismo y obteniendo los mismos resultados, nos vamos a pagar frente a este Consenso de Viena y vamos a cuestionarlo y a proponer algo nuevo?”.

Sobre si la ruptura de ese Consenso de Viena abre las perspectivas frente a que algún día pueda cambiarse el discurso antidrogas a nivel global, Miranda respondió: “Hacia el futuro, empezamos, por ejemplo, con la reducción de riesgos y daños, que es algo que rompe ese consenso tradicional”.

Este primer paso tiene que dar frutos en menos de un año, pues la directora recordó que Colombia será la sede de la Conferencia Mundial sobre Reducción de Daños del 27 al 30 de abril del 2025 en Bogotá.

Otro de los cambios que Miranda asegura que sucederán próximamente es que más países empezarán a regular el cannabis “basándose en el principio de flexibilidad que nos dan las convenciones”.

“El régimen internacional es muy paquidérmico, aunque vamos dando pasos pequeños, pero seguros hacia un cambio”, agregó la directora.

En cuanto a la coca, la directora reconoció que el proceso es más complejo: “Yo preguntaría, ¿coca para qué? Coca para usos lícitos, las convenciones lo posibilitan (…) la Convención del 61 –la primera de estupefacientes– dice en su Artículo 2.9 que podemos hacer uso de esta para fines industriales, médicos y científicos. Eso es lo que está haciendo Colombia en este momento: reglamentando esa convención.

Sin embargo, si se habla de coca para fines psicoactivos para cocaína, reconoció que ahí se está “un poco lejos desde el punto de vista internacional para que podamos hablar de mercados regulados de cocaína”.

En cuanto a los avances en la materia, Miranda lo resumió de esta forma: “En reducción de daños, en un año vamos a estar viendo resultados (…) (en la Conferencia Internacional sobre Reducción de Daños de 2025) esperamos que sea un espacio no solo técnico sino político, donde los países se comprometan al menos con tres estrategias, como por ejemplo dar Naloxona para sobredosis de fentanilo, tener salas de consumo supervisado, promover los servicios de análisis de sustancias que acá en Colombia ha salvado a 12.000 personas”.

Por eso, consideró que “la reducción de daños salva vidas”.

Otro aspecto en el que se espera ver avances es en la regulación del cannabis, pues “cada vez más países están basándose en este principio de flexibilidad que nos dan las convenciones”, por lo que se seguirá regulando el cannabis como una opción para proteger los derechos humanos y la salud pública, así como para dar mayores garantías de seguridad a los ciudadanos”.