Canciller de Brasil pidió tregua en Gaza y rechazó el desplazamiento
Además, Mauro Vieira también se reunió con el primer ministro de la Autoridad Palestina, Mohamed Shtayyeh, en Ramala, donde discutieron “estrategias conjuntas” para convertir a Palestina en miembro pleno de la ONU.
El ministro de Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, pidió este lunes un alto el fuego en la Franja de Gaza para “detener la flagrante pérdida de vidas de los palestinos”, mientras que también rechazó cualquier intento de desplazar a los gazatíes de su territorio.
El canciller brasileño recordó en una rueda de prensa desde la capital de Jordania, dónde se encuentra de viaje oficial, que durante la presidencia de su país en el Consejo de Seguridad de la ONU, el pasado octubre, intentó “aprobar una decisión para el alto el fuego” y así “frenar la flagrante pérdida de vidas de los palestinos”.
Durante la conferencia conjunta con su homólogo jordano, Ayman Safadi, recordó que Brasil mantiene “buenas relaciones con Israel y con el Gobierno actual” del primer ministro Benjamín Netanyahu, pese a que el presidente brasileño, Lula de Silva, fue declarado persona non grata en Israel a finales de febrero.
Esas relaciones con Israel, sin embargo, no impiden que Brasil apoye “el alto el fuego y el suministro de ayuda humanitaria a los habitantes de Gaza”, de acuerdo con Vieira, que recordó que su país quiere “reforzar la paz y el entendimiento en Palestina”.
El brasileño también advirtió sobre las consecuencias de la extensión de la guerra en otros puntos de Oriente Medio, algo que “debe ser evitado a toda costa”.
“Cualquier error puede llevar a una lucha con consecuencias inimaginables”, añadió.
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Por su parte, Safadi insistió en que la ofensiva militar de Israel en Gaza es “un crimen racista que no tiene justificación”, ya que implica “destruir a una sociedad por completo”.
“La ofensiva israelí contra Gaza es un crimen de lesa humanidad que tiene que parar inmediatamente, las masacres que comete Israel tienen que acabar”, espetó el jordano.
Palestina, posible miembro pleno de la ONU:
Durante su visita a Oriente Medio, Vieira se reunió con el primer ministro de la Autoridad Palestina, Mohamed Shtayyeh, en Ramala, donde discutieron “estrategias conjuntas” para convertir a Palestina en miembro pleno de la ONU, informaron el pasado domingo fuentes oficiales.
“La credibilidad del actual sistema internacional de gobernanza yace bajo los escombros de Gaza”, criticó Vieira en el perfil oficial de X de la Cancillería, en el marco de su viaje por Jordania, Palestina, Líbano y Arabia Saudí, que se extenderá hasta el miércoles.
En 2012, la Asamblea General de la ONU reconoció a Palestina la condición de Estado observador no miembro.
Desde el inicio de la guerra en Gaza, que ha causado al menos 31.645 muertos, la Autoridad Palestina, que gobierna en partes reducidas de Cisjordania, ha retomado el asunto y pedido a la comunidad internacional su apoyo para ser miembro de pleno derecho de Naciones Unidas.
Sostiene que ese estatus puede ayudar a resolver de forma pacífica el conflicto con Israel.
Brasil, cuyo presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha calificado de “genocidio” la ofensiva israelí en la Franja, se suma ahora a los esfuerzos de Colombia, que en noviembre pasado ya anticipó que propondrá la admisión de Palestina como miembro pleno de la ONU.
Para lograrlo, Palestina necesita el visto bueno del Consejo de Seguridad, donde el poder de veto de Estados Unidos, gran aliado de Israel, hace muy difícil que salga adelante dicha iniciativa.
En Ramala, Vieira participó en una ceremonia en la que recogió el título de Miembro Honorario de Consejo de Curadores de la Fundación Yasser Arafat con el que ha sido agraciado Lula, férreo defensor de la causa palestina.
En su discurso, criticó a Israel y a la comunidad internacional por la “insuficiente ayuda humanitaria” destinada a los gazatíes, objeto de intensos bombardeos por parte del Ejército israelí, en represalia por el ataque de las milicias islamistas de Hamás del pasado 7 de octubre.
El ministro brasileño tachó de “ilegal e inmoral” negar comida, agua y medicamentos a la población civil, y destruir hospitales.
El viaje por Oriente Medio se produce en medio de la crisis diplomática abierta entre Brasil e Israel a tenor de unas polémicas declaraciones del presidente Lula, que el pasado 18 de febrero equiparó ante la prensa la ofensiva militar israelí en Gaza con el exterminio de judíos promovido por Adolf Hitler.
La respuesta de Israel a esos comentarios fue declarar persona ‘non grata’ a Lula, y convocar al embajador brasileño en Israel. El Gobierno de Brasil llamó a su vez a consultas a su embajador en Tel Aviv y convocó al embajador de Israel en Brasilia para protestar por lo sucedido.
A partir de ahí, las tensiones diplomáticas escalaron con el cruce de notas y declaraciones elevadas de tono entre Vieira y su homólogo israelí, Israel Katz.