¿Gasta más energía abrir y cerrar la nevera o dejarla abierta? Le explicamos

Ahorrar energía eléctrica se vuelve en una tarea supremamente importante para muchas personas porque les permite reducir significativamente la tarifa del servicio de luz, al tiempo que contribuyen con el medio ambiente. Para cumplir con estos dos objetivos es indispensable aplicar distintas técnicas de eficiencia con los aparatos electrónicos que se tienen en casa, especialmente, los utilizados en la cocina.

De acuerdo con la empresa ‘Imagina Energía’, dedicada a ofrecer energía verde o renovable a hogares y compañías, explica que los tres electrodomésticos que más consumirían luz serían la calefacción con 2500 W, seguido del horno con 2300 Watts (W) y la lavadora con 2000 Watts; sin embargo, sus valores podrían variar dependiendo del tamaño que tenga el producto y la clase de etiquetado: A, B, C, D, E, F y G, es decir, entre más cercano se encuentre de la letra A, su consumo será menor.

Para el caso puntual de la nevera, la compañía anteriormente mencionada señala que este electrodoméstico consume un máximo de 1000 W y podría incrementar si se tienen malos hábitos de uso; por ejemplo, no descongelar con regularidad el congelador en caso de que este produzca la comúnmente llamada ‘escarcha’.

¿Gasta más energía abrir y cerrar la nevera o dejarla abierta?

Como se ha mencionado anteriormente, adquirir buenos hábitos de consumo permitirán que su recibo de luz llegue un poco más económico; por lo tanto, para el manejo adecuado de la nevera, diferentes expertos aseguran que lo mejor es dejarla abierta para sacar o meter todos los alimentos necesarios, pues si se abre y cierra constantemente “la temperatura interior de la nevera aumentará cada vez y necesitará más energía para volver a la temperatura habitual”, afirma la compañía española ‘CHC Energía’.

Cabe señalar que es importante no dejar abierta la nevera por largos periodos de tiempo porque lo único que logrará es que los alimentos se deterioren más rápido y exista una pérdida energética grande; pues “si se pierde aire frío, la nevera tiene que trabajar a una mayor potencia para lograr mantener la temperatura interna”, usando más electricidad, explica ‘Libero’, empresa de venta y reparación de electrodomésticos.

¿Cómo ahorrar energía con la nevera?

Existen infinidad de consejos o tips que las personas pueden aplicar para que la nevera no consuma enormes cantidades de energía; de acuerdo con ‘Samsung’ estos son:

• Busque la manera de que la nevera se ubique en un lugar frío, seco y con buena ventilación; asimismo, es indispensable que “no esté expuesta a la luz solar directa”.
• No bloquee los orificios o rejillas de la ventilación de este electrodoméstico.
• No introduzca alimentos calientes a la nevera, lo mejor que puede hacer es esperar a que se enfríen.
• Limpie con regularidad la parte posterior de la nevera, pues “el polvo aumenta el consumo de energía”.
• No configure el refrigerador a una temperatura más baja de lo necesario.
• Al momento de instalarlo, recuerde dejar suficiente espacio a la derecha, izquierda y arriba para que exista una correcta ventilación del aparato eléctrico.