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“No hubo protocolo de seguridad y nos insultaron”: funcionario del Palacio de Justicia

Un empleado del Palacio de Justicia relata cómo se vivió esta situación en el Palacio de Justicia.

Protestas Palacio de Justicia. EFE/Mauricio Dueñas Castañeda / Mauricio Duenas Castaneda

En diálogo con Sigue La W, Rene*, funcionario de la rama judicial y quien tiene su lugar de trabajo en el Palacio de Justicia, en el centro de Bogotá, contó lo ocurrido el 8 de febrero durante las marchas previstas en varias regiones del país.

Sostuvo que los manifestantes empezaron a llegar desde las ocho de la mañana y que para antes de mediodía todo transcurrió de manera pacífica, donde solo hubo una concentración, arengas, y con una constante llegada de más personas.

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“Se empieza a sentir la tensión porque a la hora de almorzar las puertas estaban cerradas, no había salida (…) a la una y media o dos empieza a tornarse la situación un poco densa, se pegaron a la zona de los parqueaderos y es cuando dice uno, qué pasó con el esquema de seguridad”, indicó el funcionario.

Añadió que hubo miedo por parte de las personas que estaban dentro del edificio, que en la zona de parqueaderos los magistrados estaban intentando salir y se hicieron esquemas para evacuar, pero que fue imposible.

“El esquema de seguridad sólo se brindó por los alrededores del Palacio, nosotros salimos por uno de los costados, el costado izquierdo con diagonal a la Catedral y en frente de la Casa del Florero y nos hicieron salir por tandas, custodiados”, manifestó Rene*.

También cuestionó el hecho de que muchos de los manifestantes, a medida que iban evacuando a los funcionarios, se dedicaron a lanzar insultos hasta el punto de sentirse amenazados de que les llegaran a hacer algo.

“Había fotógrafos que no eran de prensa, gente humillándonos, juzgándonos de ladrones, de corruptos. Ellos no tenían ni idea qué función cumplíamos dentro de Palacio (…) sí hubo una falta de protocolo y acompañamiento a los funcionarios a Transmilenio o de seguridad porque nos tomaron fotos, nos gritaban bestialidades, cuando uno solo trabaja acá”, puntualizó Rene.

Dijo que pese a la tensa situación que se vivió en las afueras, dentro del recinto de la rama judicial se sintió un ambiente de calma, se pudo mantener con tranquilidad a las personas y funcionarios, que no hubo traumatismos más allá de la necesidad de salir.

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