Financiera de Desarrollo Nacional respalda licitación de Segunda Línea del Metro de Bogotá
La FDN afirmó que el estudio ambiental realizado para la postulación a financiamiento internacional cumplió con todos los requisitos técnicos, financieros, jurídicos, ambientales y sociales.
Bogotá
La Financiera de Desarrollo Nacional (FDN) ha emitido un respaldo contundente al proceso de licitación internacional para la construcción de la Segunda Línea del Metro de Bogotá, despejando dudas planteadas por el concejal del Centro Democrático Daniel Briceño.
En un comunicado oficial, la FDN afirmó que el estudio ambiental realizado para la postulación a financiamiento internacional cumplió con todos los requisitos técnicos, financieros, jurídicos, ambientales y sociales. Además, señalaron que el “Estudio de Impacto Ambiental y Social - EIAS” fue fundamental para acceder a los créditos de la Banca Multilateral.
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La entidad bancaria especializada en infraestructura subrayó que hasta la fecha se han cumplido con todos los requisitos necesarios para avanzar en las etapas del proyecto, contando con el respaldo de la Banca Multilateral y cumpliendo con los estándares internacionales.
Sin embargo, el concejal Daniel Briceño presentó una carta del Banco Interamericano de Desarrollo que advierte sobre posibles conflictos de intereses entre empresas precalificadas y la empresa estatal China. Briceño sostiene que tres empresas pertenecientes a la misma compañía estatal China podrían ser el mismo oferente participando tres veces en el proceso licitatorio.
La administración anterior, liderada por la exalcaldesa Claudia López, desmintió estas acusaciones, asegurando que el BID pidió inicialmente mantener el proceso bajo reserva hasta obtener los resultados de las investigaciones. Afirmaron que fue la Alcaldía la que solicitó hacer públicos los documentos para cumplir con la normativa vigente.
La exalcaldesa López también respaldó la idoneidad de los consorcios en cuestión, destacando que el comité evaluador, independiente de la Empresa Metro de Bogotá, verificó exhaustivamente los requisitos formales y de calificación, así como la ausencia de conflicto de intereses y la elegibilidad por parte de la Banca Multilateral.