“El sonido es igual de importante que la imagen”: sonidista de la película ‘Oppenheimer’

El pasado 23 de enero, la película ‘Oppenheimer’ del director Christopher Nolan se convirtió en la gran favorita de los Premios Oscar 2024, después de que la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas le otorgara 13 nominaciones.

El sonidista estadounidense Kevin O’Connell, quien recibió la nominación en la categoría de Mejor Sonido por ambientar la cinta sobre el padre de la bomba atómica protagonizada por el actor Cillian Murphy, conversó con La W acerca de su trabajo en esta producción que ya ha tenido una próspera temporada de premios.

Sobre sus más de 20 nominaciones al Premio Óscar, O’Connell recordó que la primera vez que lo nominaron fue a los 24 años, en 1983, pero que ganó este premio por primera vez en 2017: “(Al ganar el premio) yo estaba casado y mi esposa e hijos pudieron ir a verme. Si esa es la razón, valió la pena la espera”.

En cuanto a la edición de sonido de ‘Oppenheimer’, que ha sido elogiada tanto por críticos como por la audiencia, el sonidista aseguró que el sonido es tan importante como las imágenes, porque este “es el centro de la emoción como lo es la música, es el que le da la atención a la película y le da impacto”.

Por ese motivo, reiteró que, para directores de películas como ‘Oppenheimer’, resulta de vital importancia tanto la música como el sonido.

“Pasamos mucho tiempo repasando cada aspecto de la película para que el espectador reciba cada atención y cada emoción en todas las escenas. Por eso vemos que tanto la música como el efecto de sonido se ponen muy fuertes y tienen impacto sobre el diálogo. El director no solo quiere que vean y escuchen la película, sino que además la sientan”, expresó.

O’Connell también afirmó que trabajó con todo un equipo de artistas de sonido y cada uno tenía funciones específicas. En cuanto a él, tenía en sus manos la mezcla de la música y de los efectos de sonido: “El trabajo se centró en balancear la música, el diálogo y los efectos de sonido. Es una película de tres horas, entonces nos tomamos alrededor de dos meses y medio o hasta tres para solo trabajar en ese lapso. Requirió de mucho tiempo balancear (el sonido) hasta llegar a lo que Chris Nolan estaba buscando”.