Internacional

Denuncian la detención de sacerdote que criticó el enriquecimiento de Ortega

Esta detención se suma a la del sacerdote Carlos Avilés, vicario general de la Arquidiócesis de Managua, quien también fue arrestado este día. Ambos pertenecen a la Arquidiócesis de Managua, Masaya y Carazo.

Daniel Ortega, presidente de Nicaragua. (INTI OCON / AFP via Getty Images) / INTI OCON

El sacerdote nicaragüense Héctor Treminio, de la Arquidiócesis de Managua y que criticó el enriquecimiento del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, en el poder desde 2007, fue detenido este jueves por la Policía, con lo que suman dos curas encarcelados este día, denunció la abogada e investigadora nicaragüense exiliada Martha Patricia Molina.

Más información

Policía y paramilitares secuestran a sacerdote Héctor Treminio, de la parroquia Santo Cristo de Esquipulas de la Arquidiócesis de Managua”, señaló Molina, autora del estudio titulado ‘Nicaragua: ¿Una Iglesia perseguida?’, a través de su cuenta de la red social X (antes Twitter).

Testigos publicaron en las redes sociales fotografías de un vehículo sedán, con placa nicaragüense, en el que presuntamente trasladaron al sacerdote Treminio, también tesorero de la Arquidiócesis de Managua.

El religioso fue uno de los que condenó la quema de la venerada imagen de la Sangre de Cristo, calcinada el 31 de julio de 2020 en su capilla en la Catedral de Managua en un incendio involuntario, según las autoridades, y de acuerdo con la Iglesia Católica, en un acto terrorista.

Sacerdote: Familia Ortega “son los mayores capitalistas” de Nicaragua

En esa misma homilía, ofrecida en agosto de 2020, Treminio también criticó el enriquecimiento de la familia Ortega, de los que dijo “hoy son los mayores capitalistas de nuestro país”.

“¿Acaso no son los que iban a velar por los pobres y hoy son los que se mueven en carros que valen 240.000 dólares?” ¿Y dónde está la consigna de los pobres?”, reprochó.

Treminio es el segundo religioso nicaragüense detenido este jueves por la Policía. El primero fue el sacerdote Carlos Ávilés, vicario general de la Arquidiócesis de Managua, “quien en años anteriores declaró que el presidente Daniel Ortega miente al decir que en Nicaragua hay libertad”, recordó la investigadora Molina.

Ambos pertenecen a la Arquidiócesis de Managua, Masaya y Carazo, que dirige el cardenal nicaragüense, Leopoldo Brenes, quien aún no se refiere a esas denuncias.

La semana pasada, las autoridades detuvieron al obispo Isidoro Mora, a dos sacerdotes y a dos seminaristas.

Ni el Gobierno ni la Policía Nacional ha confirmado o negado la presunta detención de los religiosos.

Hay dos obispos presos

En el caso de Mora, obispo de la diócesis de Siuna, en el Caribe de Nicaragua, fue arrestado un día después de convocar en una homilía al obispo encarcelado Rolando Álvarez, condenado en febrero pasado a más de 26 años de prisión por delitos considerados traición a la patria tras negarse a abandonar su país.

En el caso de Mora es el segundo obispo detenido en Nicaragua. El primero fue Álvarez, quien el 10 de febrero pasado fue condenado a 26 años y 4 meses de prisión, despojado de su nacionalidad, y suspendidos sus derechos ciudadanos de por vida por delitos considerados traición a la patria.

Esa condena fue dictada un día después de que Álvarez rechazó subirse a un avión que lo iba a llevar, junto con otros 222 excarcelados políticos nicaragüenses, hacia Estados Unidos, lo que provocó la indignación del presidente Ortega, quien en cadena nacional lo calificó de “soberbio”, “desquiciado” y “energúmeno”.

Las relaciones del Gobierno de Ortega y la Iglesia católica viven momentos de gran tensión, marcadas por la expulsión y encarcelamiento de sacerdotes, la prohibición de actividades religiosas, y la suspensión de sus relaciones diplomáticas.