Rechazo en el Cauca por el asesinato de un líder campesino
En la zona donde se perpetraron los hechos, recientemente habrían hecho presencia varios hombres armados portando brazaletes, presuntamente, alusivos al ELN.
Carlos Quijano, líder campesino asesinado en Silvia, Cauca. Crédito: Aida Quicué.
La Red de Derechos Humanos del Suroccidente Colombiano rechazó el asesinato del líder campesino y defensor de Derechos Humanos Carlos Arturo Quijano en la zona rural del municipio de Silvia, Cauca.
De acuerdo con la Red, la víctima fue abordada por sujetos armados que lo interceptaron cuando realizaba una entrega de leche. “Lo retuvieron, lo dejaron en estado de indefensión y posteriormente le quitaron la vida con un arma de fuego”.
Organizaciones sociales responsabilizaron del crimen al ELN.
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Carlos Arturo Quijano era líder campesino y defensor de Derechos Humanos, expresidente e integrante de la Junta de Acción Comunal de la vereda Santa Lucía, y presidente de la Asociación de Trabajadores Campesinos Pequeños Propietarios de Santa Lucía de Silvia, Cauca, filial del Proceso de Unidad Popular del Suroccidente Colombiano, PUPSOC, entre otras organizaciones.
En la zona donde se perpetraron los hechos, recientemente habrían hecho presencia varios hombres armados portando brazaletes, presuntamente, alusivos al ELN.
“Es de resaltar que el grupo armado de aproximadamente 30 personas ha hecho presencia en la zona desde hace 2 semanas, y el día anterior a los hechos, se les vio realizando seguimiento directo al líder social en las actividades cotidianas”, señaló la Red de Derechos Humanos.
El cuerpo de la víctima fue trasladado hasta las instalaciones de Medicina Legal de la ciudad de Popayán para la inspección del cadáver.
“Exigimos desarrollar las acciones legales necesarias para determinar las responsabilidades colectivas e individuales por el homicidio cometido contra el líder”, manifestó la Red.
REACCIONES
La senadora indígena Aida Quilcué lamentó el suceso violento y envió un mensaje de solidaridad a la familia, amigos y comunidad de la víctima.
Jorge Bastidas, representante a la Cámara, resaltó el trabajo del líder en el reconocimiento de la zona reserva campesina de Totoró – Silvia.
“Siento tristeza por su comunidad, por su familia y por nuestros compañeros del PUPSOC. Indigna que alguien que trabajó toda la vida por las causas campesinas termine su existencia asesinada”, dijo Bastidas.
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Por su parte, la Agencia de Desarrollo Rural publicó que “trabajábamos con él para fortalecer las comunidades campesinas. Su vida trascenderá y nos guiará”.
Este homicidio se suma al del dirigente indígena Marino Pavi Julicué de 45 años en Toribío y al de Robert Fernández, asesinado en la zona rural del municipio de Cajibío.
Estos crímenes se registraron en menos de 15 días.
El representante a la Cámara por el Cauca, Juan Pablo Salazar, manifestó que “todos los movimientos sociales defienden una causa y hay actores armados y sectores que no están de acuerdo, y es por eso que optan por la vía más fácil, que es asesinándolos o desplazándolos”, expresó.
En el departamento del Cauca, exigen acciones contundentes a la Fiscalía frente a estos hechos.
