Derogan decreto que facultaba a Policía para incautar dosis mínima: ¿qué alcances tiene?
En días pasados, fue derogado el decreto 1844 de 2018, una norma que daba la facultad a la Policía Nacional para combatir el microtráfico en espacios públicos.
Sigue La W hablo con Rodrigo Uprimny, investigador de Dejusticia y profesor de la Universidad Nacional, y el exmagistrado y expresidente de la Corte Suprema de Justicia, Jaime Arrubla, sobre la derogatoria del Decreto 1844 de 2018, que deja de perseguir a consumidores de estupefacientes.
Uprimny indicó que el Decreto 2114 de 2023 está bien orientado y que en su momento la Corte Constitucional declaró que no podía haber una prohibición general de porte de sustancias psicoactivas en espacios públicos.
“La Corte lo que dijo es que esa prohibición general es una prohibición desproporcionada que podían las autoridades municipales en ejercicio de policía, establecer restricciones específicas. Por ejemplo, decir que cerca de colegios no puede existir porte ni consumo de sustancias psicoactivas”, indicó Uprimny.
Señaló que lo que se derogó del Decreto 1844 de 2018 fue el procedimiento y la sanción mediante una multa, toda vez que en Colombia el porte y consumo mínimo de sustancias psicoactivas no está criminalizado y que tampoco puede ser sancionado con base a la jurisprudencia del país.
“Obviamente quedan vigentes todas las normas que sancionan el microtráfico, es decir que el porte para tráfico de estupefacientes es sancionable penalmente, entonces creo que se ha armado un escándalo y una tormenta en un vaso de agua por un decreto que como bien lo explicó el ministro de Justicia, es adaptar las regulaciones a las sentencias de la Corte Constitucional”, señaló Uprimny.
Por otra parte y frente a las declaraciones del expresidente Ivan Duque en la W señaló que está equivocado, porque el Decreto 1844 se prestaba para acosos policiales a los consumidores y que en ese sentido la norma debe buscar es que las autoridades focalicen adecuadamente las investigaciones en contra de organizaciones de microtráfico.
“(…) y no hacer redadas policiales para ver si de pronto por ahí aparece un jíbaro traficante. Entonces considero que esa apreciación del señor expresidente es equivocada”, precisó.
En cuanto a la efectividad de la norma para evitar el consumo en los parques, tal como se pretendía, Uprimny dijo que no fue efectiva, que se prestó para corrupción y discriminación, que adicionalmente en ninguna parte del mundo es posible hacer un control de ese tipo.
“Por eso creo es que está bien orientada la reforma constitucional que al parecer el presidnete del Senado no quiere darle el cuarto debate que es la reforma constitucional que busca que haya un mercado más regularizado de consumo adulto y exclusivamente de cannabis, uso creo que eso ayudaría mucho porque la gran mayoría de consumidores de Colombia sin consumidores de cannabis”, dijo el jurista.
Por su parte el exmagistrado y expresidente de la Corte Suprema de Justicia, Jaime Arrubla, dijo que una cosa es el consumo de la dosis mínima, pero que también es indiscutible que no puede haber tráfico
“Era un Decreto que buscaba combatir el microtráfico, porque se ampara en la dosis mínima para llevar varias dosis en el bolsillo, acercarse a un colegio y distribuirlas, entonces ese decreto (1844) decía apuntar más a eso, pero la realidad es que no cambio al mundo, antes del decreto y después del decreto del doctor Duque el problema en Colombia siguió exactamente igual”, dijo el exmagistrado Arrubla.
Añadió que ahora se llega con un Decrero derogatorio del anterior que vaya en sintonía con lo que advierte la Corte Constitucional garantizando que cada persona pueda consumir lo que quiera, pero que aquello que realmente se busca como objetivo debe ir más allá.
“Se necesita más inteligencia, se necesita capturar realmente los capos, a los distribuidores, combatirlos y no perseguir al consumidor. Lo que pasa es que el presidnete Petro está aprovechando para hacer política con la derogatoria del Decreto y eso desesperó a sus oponentes” indicó Arrubla.
Sostuvo que el decreto derogado no estaba siendo eficaz y que la política para combatir las drogas no lo debe hacer solo el país, toda vez que se requiere de apoyo internacional sin ir en contra de lo que advierten otros países, porque Colombia quedaría descalificada.