Con<b> ponencia del magistrado Francisco Farfán en Colombia, la Corte Suprema de Justicia</b> dictó orden de captura internacional contra <b>Arturo Char, excongresista</b> involucrado en el escándalo judicial de Casablanca que tiene a Aida Merlano como protagonista.W R<b>adio tuvo acceso a detalles de la decisión</b> en la que la alta Corte sustenta las razones para dictar la orden de captura internacional.Recordemos que la Sala de Instrucción libró orden de captura internacional con el propósito de hacer efectiva la medida contra Char, <b>y circular roja ante la Secretaría General de la Interpol</b>, debido a que Char fijó su lugar de residencia en los Estados Unidos, de donde tiene la respectiva nacionalidad.<b>En más de 200 páginas, la Corte expone algunos de sus más demoledores argumentos</b>. La Corte explica que hubo una operación de fraude electoral, “que en el plano fáctico fue dinamizada por coordinadores y líderes, (y que) habría sido el desarrollo del plan diseñado por la estructura delictiva que se concertó con el propósito de lograr en 2018 la elección de Aída Merlano al Senado de la República, <b>Lilibeth Llinás a la Cámara de Representantes, como su fórmula, y la propia reelección de Arturo Char Chaljub como Senador en el órgano legislativo”.</b>En la extensa investigación liderada por el despacho del magistrado Francisco Farfán, se señala uno de los argumentos más demoledores para dictar la orden de captura internacional y son las reuniones de Arturo Char Chaljub con Aída Merlano Rebolledo, y sus visitas a la sede política <b>“Casa Blanca”.</b>La Corte en el documento lo califica como indicio de oportunidad o Presencia .Señala el documento nuevo que Aída Merlano Rebolledo precisó en su testimonio dado en prisión ante el magistrado Farfán, que “sostuvo una primera reunión con<b> Arturo Char Chaljub en el lugar de residencia del aforado, encuentro en el que también participaron Julio Gerlein Echeverría y Lilibeth Llinás Delgado</b>. Dice que el propósito de este primer acercamiento fue dejar sentadas las bases para un eventual acuerdo político o de apoyo a Merlano Rebolledo para el Senado, siempre y cuando llevara como fórmula a la Cámara de Representantes a Lilibeth Llinás Delgado”, relata el alto tribunal.Y agrega: “Luego, en sus relatos adicionales, explica que en fecha posterior, es decir, entre octubre y diciembre de 2017, el procesado concurrió a la sede<i><b> </b></i><b>“Casa Blanca”, donde se consolidó el pacto, definiendo no sólo la alianza en los términos propuestos, sino además que la financiación de dicho proyecto, cuyos recursos serían destinados a la compra de votos, provendrían de Julio Gerlein Echeverría, Faisal Jacobo Cure Orfale y Alejandro Char Chaljub”.</b>En otro aparte, se lee: “La concurrencia de Arturo Char Chaljub y su presencia física en dicha sede en la fecha antes indicada, la corroboran testigos como Vicente Roger Rosanía Santiago y Edwin Rafael Martínez Salas, quienes aseveran que observaron directamente al <b>entonces senador Arturo Char un día que concurrió a una reunión informal en “Casa Blanca”, para el debate electoral de 2018″.</b>Cabe recordar que, según la versión de Arturo Char, el propósito de la reunión fue otro. La Corte desarma este argumento explicando que ei el acuerdo hubiere sido para conformar mesas directivas, “no se explica por qué la reunión para concretarlo se realizó precisamente en la sede <i>“Casa Blanca”</i> y no en otro sitio, como por ejemplo en la sede de Char, en cualquier escenario público, semipúblico, o incluso en el mismo recinto de la Asamblea”.“Dichas circunstancias, aunadas al ya explicitado interés doble que impulsaba a <i>Char Chaljub</i> para promover y financiar supuestamente el grupo delictivo ilegal, lo que implicaba incluso beneficios electorales para él mismo, llevan a inferir razonablemente, y a esta altura del proceso, <b>que la finalidad de la reunión fue probablemente la que expone de manera detallada la testigo de cargo”, concluye el documento.</b>Otro indicio demoledor en poder de la Corte Suprema es el de “mala justificación”. Y lo agrega la Corte porque, señala, existe evidencia de que fue <i>Arturo Char Chaljub</i> quien decidió que Lilibeth Llinás Delgado aspirara a la Cámara de Representantes, acompañándola incluso en presentaciones en sitios públicos.Y por eso, no resulta creíble para los investigadores cuando sostiene que Llinás Delgado realizó el pacto delictivo con Merlano a sus espaldas, “pues no parece lógico ni razonable, sino más bien una hipótesis de mala justificación, que una subordinada política decida de manera autónoma, de manera inconsulta y a espaldas de su benefactor, adopte decisiones de tal trascendencia, <b>como la escogencia de la persona o movimiento con el cual celebra una alianza política de esta magnitud, en el cual estaba además interesado </b><i><b>Char Chaljub</b></i><b>, por ser de su incumbencia”, explica la decisión.</b>Fuentes consultadas por W Radio advierten que, en vista de que el gobierno colombiano actúa a iniciativa de los jueces, es previsible que la Corte Suprema haga una solicitud de extradición, por ejemplo.Hay que recordar que la Corte habla de “concierto delictivo”, que habría ido más allá de un simple convenio político, en la medida en que, supuestamente, para conseguir la elección de Aída Merlano Rebolledo en el Senado; de Lilibeth Llinás Delgado en la Cámara; y la propia<b> reelección de Arturo Char Chaljub en el Senado, “se habrían ejecutado delitos contra </b>los mecanismos de participación democrática, a través de la compra de votos para estos tres candidatos”.“La Sala enfatiza en que estos hechos (...) conocidos y acreditados, y entre ellos, el romance que mantuvieron Aída Merlano y el otrora alcalde Alejandro Char Chaljub, pero al mismo tiempo la relación sentimental de Merlano con Julio Gerlein Echeverría, y el aporte de recursos financieros a las reseñadas campañas políticas por parte de este y de Faisal Jacobo Cure Orfale, Megacontratistas de la alcaldía de Alejandro Char, confieren sustento y respaldo a los testimonios de Merlano Rebolledo, Rocha Salcedo y Palencia Borrero en este tópico, en el sentido de que la familia Char, encabezados por Arturo y Alejandro Char, operó como el principal grupo financiador de la campaña política que se enfocó en la compra de votos, lo que reafirma,<b> por vía de prueba directa e indiciaria, el posible compromiso de responsabilidad penal del ex senador Arturo Char Chaljub”, señala otro aparte.</b>Char respondió al llamado de la justicia en Colombia explicando que entregará todas las explicaciones que sean necesarias y por su parte Alejandro Char explicó que espera que Arturo Char pueda demostrar su inocencia.