Así es el proyecto de ingeniería que llevará agua potable a la comunidad de Yotojoroshi

Ismael Ramírez y Edwin Fleschman son los ingenieros que lideran el proyecto, que, a partir de donaciones y al esfuerzo de varias empresas como Aire y Arturo Calle, busca llevarle el suministro de agua potable a, cerca de 200 familias y 500 personas de la comunidad indígena de Yotojoroshi en La Guajira.

Los profesionales explicaron a La W con Julio Sánchez Cristo sobre la manera en la que se desarrolla este trabajo en La Guajira y cómo se garantizará la sostenibilidad del mismo para el bienestar de la comunidad de Yotojoroshi.

“Este proyecto se está ejecutando gracias a la donación de colombianos, colombianas y de diversas entidades que quisieron participar. La tienda de la empatía ha hecho también un gran esfuerzo para que esto se pueda llevar a cabo”, explicó Ismael Ramírez.

Según Edwin Fleschman “el proyecto que se diseñó implica sacar agua de 80 metros bajo la tierra mediante un molino de viento, esta agua la almacenamos en una alberca que tiene 32 metros cúbicos, luego pasa a una planta de ósmosis inversa que le quita la sal. De allí, sale a dos tanques de 10 metros cúbicos y se reparte a la comunidad”.

“En principio cada persona de la comunidad va a poder usar 20 litros diarios, la comunidad son 200 familias y 500 personas. Pretendemos, en una segunda etapa, llevarle agua a las comunidades circunvecinas, tenemos otros 10.000 litros de agua para ellos”, aseguró el profesional.

“Las tecnologías ya se habían usado en la Guajira. La empresa que instala la planta de ósmosis inversa está radicada aquí. La comunidad va a ser entrenada y a participar en el tema: va a conocer cómo se instala, cómo se opera y cómo va a funcionar”.

En cuanto a la sostenibilidad, los ingenieros son positivos: “el agua la sacamos por un molino de viento. No vamos a tener problema para garantizar la existencia del agua y a la comunidad se le capacita para hacer el mantenimiento de la planta. Tres personas van a saber sobre paneles y cambio de filtros: cómo hacer para que el sistema funcione”.

“Sistemas abandonados hay miles en La Guajira, porque no se garantiza la sostenibilidad. Pasan daños menores, la comunidad no sabe como manejarlo y lo abandona”, puntualizaron los ingenieros.

Con este proyecto, que lleva mas de un año en su materialización, se lleva a cabo una concientización de la comunidad, para que se apropien de esto. La mejor interventoría aquí es la comunidad, para que ellos mismo estén pendiente de su funcionamiento y su operación.

De acuerdo a los ingenieros Fleschman y Ramírez la fecha de entrega de este proyecto podría ser la primera semana de noviembre.

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