Uno de los productos comestibles más reconocidos y comerciados en el mundo son las galletas. Existe una variedad bastante amplia de sabores, formas, colores, rellenos y cualquier disposición posible que se pueda ocurrir para estos bocadillos.

Eso sí, existe un tipo de galleta, en particular, cuya forma y aspecto suele tener siempre una misma disposición, la cual es globalmente reconocida por consumidores alrededor del planeta. Se trata de las galletas saladas, acompañantes ideales de diversos aderezos o ‘Toppings’, a gusto del usuario.

La característica tradicional que permite que personas, de muchas culturas y países, reconozcan por igual estas galletas son sus agujeros. Aunque se trate de un producto habitual en la alimentación, su aspecto invita a la curiosidad y a preguntarnos: ¿qué se oculta detrás de estos agujeros? ¿Cuál es su función?

¿Por qué tienen agujeros las galletas?

De acuerdo con la Enciclopedia Británica el misterio está relacionado directamente con los desarrollos técnicos de la conocida moderna, los cuales nos han llevado a crear los denominados “agujeros de acoplamiento”.

Estos funcionan conectando las capas superior e inferior de la masa durante la preparación, evitando que se formen bolsas de vapor durante el horneado. “Más agujeros significa una galleta más densa”, resalta la publicación.

¿Qué significa la cantidad de agujeros?

La mayoría de las galletas pequeñas sólo necesitan un agujero en el centro, mientras que cuatro agujeros en galletas más grandes permitirán que salga suficiente vapor, según explicó al portal de cocina All Recipes, Kristen Sirbak, propietaria de Beverly’s Pastry Shop en Pottstown, Pensilvania.

Subraya All Recipes que la forma de espaciar los agujeros también es importante. “Si los agujeros están muy juntos, las galletas resultan secas y difíciles de masticar. Si los agujeros están demasiado separados, la galleta se desintegrará”, en palabras de la pastelera consultada por el medio.

¿Qué pasa si no hay suficientes agujeros?

Como hemos visto, los agujeros en las galletas saladas no son un asunto meramente estético.

Dice el sitio web de curiosidades Distractify que, si hay demasiados agujeros en la masa, la galleta resultante estará seca y dura porque se ha escapado demasiado vapor.

Por otra parte, si no hay suficientes agujeros, la galleta puede quedar demasiado “chiclosa o pastosa”. En ese sentido, demasiadas burbujas o bolsas de aire también podrían quemar partes de la galleta, lo cual puede resultar poco agradable, señala el sitio.