Nos disfrazamos de ‘paracos’ y matamos a cuatro personas: soldado Contreras ante la JEP
Por otra parte, otro de los militares contó que aquellos que consumían droga como él, eran más proclives a ser enviados a Medellín a reclutar habitantes de calle para matarlos en Dabeiba, Antioquia.
Soldado (r) Levis Contreras. Foto: Cortesía JEP
En el marco de la segunda jornada de la audiencia de reconocimiento de ocho militares responsables de 49 falsos positivos en el municipio de Dabeiba, Antioquia, la cual se adelanta en Medellín, los responsables relataron crudamente cómo se reclutaba a habitantes de calle y personas de escasos recursos para llevarlos desde Medellín al municipio y matarlos.
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Uno de los testimonios más sobrecogedores fue el del soldado (r) Levis Contreras, uno de los implicados y quien contó a su vez cómo comenzaron a esparcir el fenómeno criminal, según él, con el coronel (r) David Guzmán, iniciando en Ituango y de la mano con los paramilitares. Por ejemplo, narró que incluso se disfrazaban de “paracos”.
“Con ayuda de paramilitares nos disfrazábamos de paracos y fue así como irrumpimos en una escuela en Ituango en 2004, sacamos a 12 personas y fueron presentadas como caídas en combate cuatro de ellas” sentenció Contreras.
Frente a la construcción de la “logística criminal” para reclutar a las víctimas desde Medellín y llevarlas hasta Dabeiba engañadas, el sargento Fidel Ochoa señaló que una de las personas, a quien le ofrecieron una supuesta oferta laboral en Dabeiba (Antioquia) fue asesinada por el propio coronel (r) David Guzmán accionando el arma.
“Con órdenes específicas llegamos a esta terminal e interceptamos a un joven con ganas de trabajar y lo engañamos y lo llevamos a cercanía del municipio de Dabeiba donde fue asesinado por el mismo comandante de Batallón” señaló Ochoa.
Otro de los militares que detalló los homicidios fue el soldado (aún activo) Luis Fidel Arenas, quien por ejemplo reveló que en su calidad de consumidor se le hacía más fácil a él y a otros soldados, en similar condición, que los enviaran hasta Medellín para convencer a los habitantes de calle con un falso trabajo o “vicio”.
Asimismo, el sargento Jaime Coral narró que los propios soldados compraban las botas, sudaderas y el resto de la “dotación” para que las víctimas fueran vestidas hasta Dabeiba y llegaran listas para ser asesinadas.
“Les compraban sudaderas, botas, negras, de tal manera que fingieran ser guerrilleros, ellos motivados en que era un regalo se ponían las prendas sin poner ninguna clase de resistencia” señaló Coral.
Finalmente, el sargento Fidel Ochoa reiteró que no eran “ruedas sueltas” y que aunque “se pone una lápida al cuello” cuando nombra al general Montoya y lo van a seguir nombrando, dice, ello es porque “mientras sucedían estos casos en Dabeiba también sucedían en las unidades acantonadas en Medellín”.
“Los falsos positivos se vuelven sistemáticos en el Ejército nacional cuando llega a la Séptima División con sus insinuaciones” señaló sin ambages Ochoa.
