Contraloría cuestiona millonarios contratos del exministro Diego Molano
Alotrópico, empresa de subalternas del exministro de Defensa, tenía contratos para cumplir tareas de funcionarios de planta.
Contraloría cuestiona millonarios contratos del exministro Diego Molano
La Contraloría General de la República revelará en los próximos días un informe de auditoría sobre el Ministerio de Defensa Nacional. Varios capítulos del documento de 167 páginas están relacionados con la herencia que dejó el anterior ministro Diego Molano.
Un punto crítico tiene que ver con la empresa Alotrópico, una firma de comunicaciones que recibió millonarios contratos de la cartera de Defensa y que pertenece a tres antiguas subalternas y amigas del ahora precandidato a la Alcaldía de Bogotá, Diego Molano.
Los auditores de la Contraloría encontraron que las amigas del ministro recibieron millonarios contratos para cumplir exactamente las mismas funciones que tiene la Oficina de Comunicaciones del Ministerio de Defensa.
El hallazgo de la Contraloría está descrito en el informe de auditoría en los siguientes términos: “dicho objeto contractual es idéntico al contenido en un decreto que establece las funciones desempeñadas por la entonces Oficina de Comunicación Sectorial del Ministerio de Defensa Nacional”.
Es decir, los auditores encontraron que el Ministerio contrató a una empresa externa para cumplir las tareas que ya tenían asignadas funcionarios de planta.
La Contraloría también anota que “se infiere la ocurrencia de daño fiscal estimado en 1.493 millones de pesos derivado de la contratación injustificada de servicios profesionales (…) por cuanto la entidad tiene personal asignado (…) para el ejercicio de las actividades contratadas”.
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De acuerdo con el documento de auditoría estos contratos no solamente podrían suponer problemas fiscales sino también penales porque podrían tipificar el delito de Celebración Indebida de Contratos.
La empresa favorecida se llamaba Alotrópico SAS, pero cambió su nombre a La Triada, comunicación y mercadeo social SAS. Sus dueñas son Lilian Polanía, Martha Isabel Restrepo e Isabel Quiroga. Las tres trabajaban bajo las órdenes de Diego Molano cuando era director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Lilian Polanía eran miembro de la oficina de comunicaciones del ICBF, Martha Isabel Restrepo era la coordinadora de comunicación audiovisual de la misma entidad e Isabel Quiroga era la directora del departamento.
La Triada pasó del sector público al privado casi al tiempo con el primer ascenso de Diego Molano. Cuando él se convirtió en director del Departamento Administrativo de la Presidencia de Iván Duque, las tres damas empezaron a recibir un contrato tras otro.
Sin embargo, su mayor fortuna empezó cuando Diego Molano se convirtió súbitamente en ministro de Defensa por la muerte del titular de la cartera Carlos Holmes Trujillo.
Las emprendedoras amigas del ministro fueron favorecidas por estos contratos que cuestiona la Contraloría y que, como en su momento lo denunció la periodista Ana María Cuesta, fueron tramitados en cuestión de horas.
Por ejemplo el miércoles 31 de marzo de 2021, que era el miércoles de semana santa, el Ministerio de Defensa solicitó a la empresa Alotrópico SAS, hoy La Triada -y a nadie más- que le presentara una oferta de servicios. La propuesta llegó inmediatamente y ese mismo miércoles de semana santa le firmaron un contrato por 898 millones de pesos.
Dos de las señoras de La Triada están casadas con miembros de las fuerzas armadas. Isabel Quiroga, por ejemplo, es la esposa del coronel de la Policía Alex Uriel Durán, a quien el ministro Diego Molano convirtió en su ayudante personal.
Antes de terminar el gobierno Duque, el ministro Molano les firmó a sus amigas un contrato por casi 600 millones de pesos con un objeto que parece metafísico, oigan esto “emprender acciones de transformación y protección de imaginarios que tiene la población en relación con los temas relacionados con seguridad y defensa del Estado”.
La Contraloría no solamente encontró injustificado el gasto sino que en su concepto debe dar origen a investigaciones de la Fiscalía y la Procuraduría y dice “Lo observado se confirma y se convierte en hallazgo manteniendo las incidencias administrativa, penal, disciplinaria y fiscal”.
El precandidato a la Alcaldía de Bogotá, Diego Molano, como ministro de Defensa fue renuente a dar explicaciones sobre los contratos a la empresa de sus amigas de Alotrópico, hoy llamada La Triada. Quizás ahora encuentre el tiempo para responder por este asunto.
Bonus track: Catorce horas duró la audiencia de apelación a la decisión de la juez que negó la preclusión que pedía la Fiscalía para favorecer al expresidente Álvaro Uribe.
Las normas de estas audiencias establece que después de la sustentación del recurso presentado por la Fiscalía, los no recurrentes, es decir todo los demás, deben limitarse a expresar su concepto sobre la petición.
El expresidente Uribe, sus abogados y el delegado de la Procuraduría quisieron convertir esta audiencia en un debate sobre las interceptaciones telefónicas, que ya han sido avaladas por la Corte Suprema y por el Tribunal Superior de Bogotá.
El único foro válido para discutir nuevamente el alcance de esas pruebas será la audiencia preparatoria del juicio al expresidente. Escenario que solo ocurrirá si el Tribunal niega la apelación.