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Salvatore Mancuso acusa a Sabas Pretelt de “emisario” para conformar paramilitares

Además, vinculó a un exdirector de Interpol y edecán del expresidente Álvaro Uribe con el asesinato de un reincorporado. Adicionalmente también salpicó oficiales por la masacre de Pichilín (1996).

Salvatore Mancuso y Sabas Pretelt. Foto: Colprensa y cortesía JEP.

En medio de la andanada de declaraciones del exjefe paramilitar, Salvatore Mancuso, ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) señaló que de todas partes del país llegaron a Córdoba en los noventas para pedir la conformación de grupos paramilitares ante el asedio de las guerrillas a diferentes sectores.

Dentro de los nombres que acusó Mancuso de quienes aseguró hicieron esas gestiones ante él y otros exjefes de las Autodefensas, como Carlos Castaño, mencionó al exdirector de Fenalco y exministro del interior Sabas Pretelt de la Vega, de quien dijo llegó con esa solicitud como emisario de los comerciantes.

Según Mancuso, estaban desesperados en las troncales por retenes de los grupos guerrilleros que no permitían que las mercancías se pudieran trasladar con tranquilidad.

“El director de Fenalco que fue ministro del interior, Sabas Pretelt de la Vega él nos trasladaba las preocupaciones de los comerciantes y el pedido de creación de Autodefensas en las troncales que comunicaban el interior del país con la costa” fue lo que dijo Mancuso.

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Además, frente al departamento del Cesar, expresó que el “clan Gnecco” fue uno de los grupos políticos que llegó ante ellos para que conformaran grupos paramilitares en ese departamento también vinieron de Córdoba algunos como Oliverio Otero, en el Magdalena igualmente.

Asimismo, reiteró sus señalamientos contra el exvicepresidente Francisco Santos, expresando que fueron varias las reuniones a las que asistió en nombre de la “oligarquía” bogotana para pedir la conformación del Bloque Capital, uno de esos encuentros (según Mancuso) con Carlos Castaño. De hecho, afirmó que Santos lo llevó hasta el diario El Tiempo para que expusiera a los editorialistas su filosofía y se produjo un editorial que viabilizó el ideario de las AUC.

Frente a la masacre de Pichilín, el homicidio de un alcalde y un exdirector de la interpol

Sobre tal masacre ocurrida en 1996 y donde 11 personas fueron asesinadas en ese corregimiento del municipio de Morroa (Sucre), afirmó que desde la Fuerza Pública tuvieron la colaboración de un mayor de apellido Parra quien era el director de la Sijín de Sincelejo y un coronel de apellido Díaz Granados quien para la fecha, según Mancuso, era el comandante del Batallón 3 de Infantería.

Además, afirmó que con el propio comandante de la Policía de San Jacinto (Sucre), teniente Óscar Alexander Solano Pedraza, organizaron el homicidio del alcalde de la población en 1997, Carlos Quiroz, y su hermano Fredy Quiroz.

Frente a otro asesinato, afirmó que en el caso del homicidio del desmovilizado Freddy Fuentes Paternina del CRS, ese asesinato fue cuadrado con Henry Rubio Conde, excomandante de la Sijín en Córdoba y exdirector de la Interpol así como edecán del expresidente Álvaro Uribe. De acuerdo con Mancuso, en ese crimen murió también el escolta de Fuentes.

Finalmente dijo, que el trabajo con la Policía y el Ejército siempre fue “de la mano” aunque actualmente le digan que “es un mentiroso” y ahora lo consideran “el enemigo de todos ellos, y en el pasado fueron nuestros amigos”, afirmó.