Internacional

Murieron dos israelíes en Cisjordania tras bombardeos de Israel contra Gaza y Líbano

Dos mujeres israelíes murieron en un ataque armado en Cisjordania ocupada tras los bombardeos de Israel contra la Franja de Gaza y el sur de Líbano, en plena escalada de violencia en la región.

Bombardeos de Israel contra Gaza y Líbano. Foto: Getty Images. / YOUSEF MASOUD

La tensión se agudizó después de la intervención de la policía israelí el miércoles en la mezquita Al Aqsa de Jerusalén, coincidiendo con las fiestas del Ramadán musulmán y la Pascua judía.

Decenas de cohetes fueron lanzados contra Israel el jueves, y el viernes en la madrugada el ejército israelí respondió con ataques en Líbano y la Franja de Gaza contra posiciones del movimiento palestino Hamás.

Este viernes en Cisjordania dos hermanas israelíes de unos veinte años de edad murieron y su madre resultó herida en un ataque a tiros contra su vehículo, informó el Magen David Adom, el equivalente israelí de la Cruz Roja.

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El ejército precisó que su vehículo fue atacado en el cruce de Hamra, en el norte del valle del río Jordán, en Cisjordania, un territorio palestino ocupado por Israel desde 1967.

- “Pagar el precio” -

Este ataque se produjo pocas horas después de que el ejército israelí lanzó bombardeos sobre Gaza y Líbano contra “infraestructuras terroristas pertenecientes a Hamás”.

En Tiro, en el sur de Líbano, periodistas de la AFP escucharon fuertes explosiones.

Al menos dos obuses cayeron cerca del campo” de refugiados palestinos de Rashidieh, dijo el refugiado Abu Ahmad a la AFP.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, había advertido sobre una firme reacción de Israel. “Golpearemos a nuestros enemigos y les haremos pagar el precio de cada agresión”, aseguró.

El jueves, en el día de la Pascua judía, una treintena de cohetes fueron disparados contra Israel desde Líbano, en la mayor escalada desde 2006 en la frontera entre estos dos países, que técnicamente siguen en guerra tras varios conflictos.

Desde abril de 2022 no se lanzaban cohetes desde Líbano hacia Israel, que entonces también efectuó ataques contra su vecino. Sin embargo, este es el incidente más grave desde la guerra de 2006 contra Hezbolá.

“Las amenazas e intimidaciones de los dirigentes sionistas no conducirán a nada”, dijo el viernes Naim Qasem, segundo del movimiento chiita Hezbolá, que controla de facto el sur de Líbano.

“Todo el eje de resistencia se encuentra en estado de alerta”, agregó.

- Llamados a frenar la escalada -

El movimiento palestino Hamás condenó “en los términos más fuertes posibles la espantosa agresión israelí contra la Franja de Gaza asediada y Líbano”.

Hamás y la Yihad Islámica informaron el viernes a Egipto --que habitualmente actúa como mediador-- que “las facciones palestinas van a seguir con los lanzamientos de cohetes, si Israel continúa sus agresiones y bombardeos”, afirmaron a la AFP fuentes de estos grupos en Gaza.

El ministerio libanés de Relaciones Exteriores afirmó que su país quiere preservar la calma en la zona sur y llamó a la comunidad internacional a “presionar a Israel para frenar la escalada”.

El jefe de la Fuerza Interina de Naciones Unidas (FINUL), el general Aroldo Lázaro, habló con autoridades tanto de Israel como de Líbano y aseguró en un comunicado que “ambos lados han dicho que no quieren la guerra”.

Francia reiteró “su apego indefectible e la seguridad de Israel y a la estabilidad y la soberanía del Líbano”. Rusia urgió a “poner fin a la violencia”.

El portavoz del ministerio iraní de Relaciones exteriores, Nasser Kanani, denunció las “acciones agresivas del régimen sionista”.

El Reino Unido llamó a “todas las partes” a una “desescalada”.

Estos episodios se producen después del violento desalojo de fieles palestinos en la mezquita Al Aqsa de Jerusalén, que dejó 350 detenidos según la policía y 37 heridos según la Media Luna Roja.

El templo se sitúa en la Explanada de las Mezquitas, tercer lugar santo del islam y ubicado a su vez en Jerusalén Este, el sector palestino de la ciudad ocupado y anexado por Israel desde 1967.

El complejo está erigido encima del Monte del Templo, considerado el lugar más sagrado para el judaísmo.

Israel recibió numerosas condenas internacionales, incluida de la ONU, cuyo secretario general António Guterres pidió nuevamente a “todos los actores” la “máxima moderación”.