Recursos para seguridad de TransMilenio, invertidos en bonos y anchetas: Contraloría
En el IDU, se encontraron tres hallazgos fiscales por más de $2.335 millones, principalmente por incumplimientos del consultor en la calidad de los estudios y diseños.
TransMilenio | Crédito: iStock
La Contraloría de Bogotá ha detectado hallazgos fiscales por un total de $9.228 millones en el Sector Movilidad, tras realizar auditorías a la Secretaría Distrital de Movilidad, el Instituto de Desarrollo Urbano y TransMilenio.
La mayor parte de los hallazgos se registraron en la Secretaría de Movilidad, donde se identificó la falta de gestión de cobro de 11.025 infracciones de tránsito que prescribieron, lo que representa el 55.3% del valor total de los hallazgos.
Se encontró además que el 6% de los comparendos analizados no correspondían a la infracción establecida, el 40% de los acuerdos de pagos fueron remitidos sin mandamientos de pago y el 8% de los documentos no correspondían al infractor.
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En el IDU, se encontraron tres hallazgos fiscales por más de $2.335 millones, principalmente por incumplimientos del consultor en la calidad de los estudios y diseños y valores adicionales por las prórrogas en la etapa de preliminares que se registraron en los contratos de obra para Avenida Guayacanes.
También se detectó que se habían presupuestado estampillas distritales y no se realizaron las deducciones en las órdenes de pago durante la ejecución del contrato de la extensión de la Troncal Caracas en su tramo uno.
Por último, en TransMilenio se detectó un hallazgo fiscal por $1.787 millones debido a que los recursos destinados a fortalecer la seguridad, convivencia y vigilancia de los usuarios del sistema de transporte se invirtieron en bienes y servicios que no correspondían al objeto del convenio, como bonos y anchetas que se les dieron a los policías, y que tampoco le proporcionaron utilidad al sistema.
Todos estos hallazgos fiscales en el Sector Movilidad fueron trasladados a la Dirección de Responsabilidad Fiscal para que se adelanten las indagaciones del caso y se logre el resarcimiento del daño patrimonial ocasionado al Distrito. Por su parte, la Contraloría de Bogotá seguirá trabajando en su labor de fiscalización para garantizar la correcta gestión de los recursos públicos en la ciudad.