Coronel exasesor de general Óscar González negó encubrir falsos positivos

La W Radio tuvo acceso a la versión voluntaria rendida por el coronel (r) Freddy Niño Chía, exasesor jurídico de la Cuarta Brigada del Ejército durante la comandancia del general Óscar González Peña, según la JEP, y quien aseguró que se enteró por medios de comunicación en el año 2003 sobre las denuncias de posibles ejecuciones extrajudiciales. Afirmó que cuando estuvo en Medellín, inició investigaciones con contrainteligencia y Fiscalía para esclarecer si eran bajas legítimas confundidas con “falsos positivos” o si realmente se cometían ejecuciones irregulares en el marco de combates legales.

“Eran bajas diría yo, legítimas. Pero a veces se confundía esos resultados legítimos con ejecuciones extrajudiciales que habían cometido algunos oficiales. Lo que yo quería con la Fiscalía era establecer precisamente esa diferencia” afirmó el coronel.

Aunque Niño aseguró que no todas las bajas eran ilegítimas, mencionó que sí se tuvo información de oficiales, suboficiales y soldados relacionados que estaban siendo investigados, los cuales aducían a una “guerra jurídica” para negar responsabilidad.

También afirmó que cuando se encendieron las alarmas de lo que estaba pasando, ya había transcurrido bastante tiempo “nos dedicamos más a la inteligencia y descuidamos la contrainteligencia”. Así mismo, contó que cuando las ONG comenzaron las denuncias de la situación, en un inicio no se creyó porque “se pensaba que se hacía pasar a guerrilleros por campesinos, pero a medida que fueron aumentando las denuncias (...) el Ejército Nacional ya empezó a trabajar de la mano no solo con la Fiscalía sino también con Procuraduría”.

Los magistrados le preguntaron al coronel por qué en el expediente aparecen personas en estado de indefensión (ahora identificadas como guías desmovilizados encapuchados) que en su momento fueron expuestas como criminales a las que se les dio de baja en combate, a lo que él respondió que quien cometió estas ejecuciones “está incumpliendo una orden dada (...) con el pleno conocimiento que muy seguramente se estaba metiendo en problemas porque no lo podía hacer (...) si un funcionario del Ejército Nacional de Colombia es capaz de cometer una ejecución extrajudicial, puede hacer de todo” sentenció.

Durante la diligencia, el coronel también respondió a las afirmaciones del coronel Santiago Herrera ante la JEP, y reveladas por La W, en las que mencionó que Freddy Niño lideraba un batallón que “perseguía fiscales”.

El oficial desmintió este señalamiento diciendo que “cualquiera de los fiscales de la época podrá decir que la única presión que yo he ejercido sobre ellos, era que se subieran rápido al helicóptero porque se nos iba a cerrar el tiempo y no iban a poder entrar a la zona. Pero decir que yo presionaba fiscales para que nadie pasara detenido, basta con mirar las cifras para que miraran a partir de esa época cuántos pasaron detenidos y cuántos fueron condenados” sostuvo.

Adicionalmente, frente a la acusación de Herrera al decir que esa unidad militar que supuestamente Niño comandaba solicitó apoyo económico a los empresarios de Medellín y de Antioquia para crear una especie de fundación, que solventara los recursos para pagar la defensa de los militares que estaban en procesos judiciales, respondió: “jamás recibí un peso de un empresario, tampoco conocí porque nunca los vi (...) como yo le decía cuando llegué en octubre en 2006 todos los soldados tenían abogados. Es decir, había muchas empresas de abogados de Medellín y de Bogotá que les ofrecían a los soldados para que se defendieran, pero yo creo que era un tema de oferta y demanda”.

Finalmente, negó cruzarse en alguna unidad, brigada o batallón con el coronel Santiago Herrera, asegurando que no coinciden los tiempos que Herrera menciona, y negó trabajar en algún proyecto de defensa de militares involucrados en procesos judiciales.