Brasil busca sobrevivientes del temporal con 40 muertos y 2.500 evacuados
El Gobierno de Sao Paulo calificó el desastre como “una de las mayores tragedias de la historia” de la región.
Brasil movilizó este lunes a cientos de efectivos para encontrar posibles supervivientes del fuerte temporal que azota el litoral de Sao Paulo y que ha causado por el momento 40 muertos, alrededor de 40 desaparecidos y casi 2.500 evacuados, además de numerosos daños materiales en esta turística región.
Las intensas precipitaciones del fin de semana provocaron graves inundaciones y deslizamientos de tierra, dejando un rastro de destrucción a su paso en media docena de municipios paulistas, que estos días habían recibido a decenas de turistas por el Carnaval.
Le puede interesar:
Muchas comunidades continúan aisladas por vía terrestre, incomunicadas y sin suministro de agua, ni electricidad, mientras “más de 600 efectivos” del Cuerpo de Bomberos, la Policía, las Fuerzas Armadas y Defensa Civil se afanan en las labores de rescate, según fuentes oficiales.
El Gobierno de Sao Paulo, que preside Tarcísio de Freitas, exministro de Infraestructura del Gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2022), decretó el “estado de calamidad pública” en seis ciudades: São Sebastião, Caraguatatuba, Guarujá, Bertioga, Ilhabela y Ubatuba.
Casi 2.500 personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y están alojadas en escuelas y organizaciones de la sociedad civil. Entre las decenas de heridos, hay seis en estado grave, según señaló la Secretaría de Salud de Sao Paulo.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva interrumpió sus días de descanso en el estado de Bahía y visitó hoy las zonas afectadas, donde prometió reconstruir las viviendas destruidas y llamó a edificar en lugares “seguros”, alejados de zonas de riesgo.
“Ustedes van a volver a tener un nido para cuidar a sus familias”, aseguró el mandatario a las familias afectadas durante un pronunciamiento en Sao Sebastiao.
El jefe de Estado también quiso mandar un mensaje de unidad al lado del gobernador Tarcísio de Freitas, aliado del ahora expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro, quien durante su mandato fue criticado en diversas ocasiones por no acudir o hacerlo tarde a zonas golpeadas por tragedias climáticas.
En medio de ese clima de cordialidad, Lula pidió a las autoridades municipales encontrar una zona segura para “reconstruir” las casas que fueron sepultadas o resultaron seriamente damnificadas.