Internacional

Presidenta de la Comisión Europea propone creación de un “club de materias primas”

La idea es fortalecer colectivamente las cadenas de suministro y dejar de lado la dependencia de proveedores únicos

ROME, ITALY - 2023/01/09: Ursula von der Leyen, president of the European Commission,(Photo by Vincenzo Nuzzolese/SOPA Images/LightRocket via Getty Images) / SOPA Images

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, propuso hoy la creación de un “club de materias primas críticas” entre la Unión Europea y países como EE.UU., Reino Unido o Canadá para contrarrestar el “monopolio” chino en ese área esencial para la transición climática.

Podemos construir un Club de Materias Primas Críticas trabajando con socios con ideas afines, desde los EE.UU. a Ucrania, para fortalecer colectivamente las cadenas de suministro y diversificarse lejos de los proveedores únicos”, declaró Von der Leyen en su discurso ante el Foro de Davos.

La presidenta del Ejecutivo comunitario abogó también por que los subsidios a tecnologías “limpias” de la Unión Europea, Japón, Reino Unido o Estados Unidos “sean justos y se refuercen mutuamente” y generen un beneficio conjunto, “por ejemplo, creando economías de escala a través del Atlántico o estableciendo estándares comunes”.

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“Juntos, la Unión Europea y EE.UU. han propuesto casi un billón de euros para acelerar la economía de la energía limpia. Esto tiene el potencial para impulsar masivamente la neutralidad climática”, dijo Von der Leyen, quien agregó que “las próximas décadas verán la mayor transformación industrial de nuestros tiempos, tal vez de cualquier época”, y destacó cuatro ejes en los que trabaja la UE para afrontar ese desafío tecnológico.

El primero precisa crear un “entorno regulatorio” propicio para acelerar y escalar las condiciones para desarrollar los sectores de la energía eólica y solar, las bombas de calor, el almacenamiento de energía o el hidrógeno limpio, con vistas a alcanzar las cero emisiones de CO2 a mitad de siglo.

Además de el citado “club” de materias primas críticas, la política alemana avanzó que la Comisión Europea prepara una Ley de Industria Neta Cero que complementará a la Ley de Materias Críticas Raras, también en preparación, para “tierras raras que son vitales para la manufactura de tecnologías clave”.

“Europa es actualmente dependiente al 98 % en un país, China”, subrayó Von der Leyen.

La segunda línea de acción comunitaria pasa por impulsar, a corto plazo, las inversiones y la financiación de la producción de tecnologías limpias mediante una adaptación temporal de las reglas de ayudas de Estado de la UE y, a medio plazo, a través de la creación de un “fondo de soberanía” europeo que proporcione una “solución estructural” para impulsar la investigación, innovación y los proyectos industriales clave.

En tercer lugar, Bruselas quiere desarrollar las “habilidades” de los trabajadores para afrontar los cambios tecnológicos y como cuarta prioridad Von der Leyen destacó la necesidad de “facilitar el comercio abierto y justo para el beneficio de todos”.

En ese capítulo, la alemana llamó a exprimir al máximo y superar las dificultades de los acuerdos comerciales con Canadá y Reino Unido, concluir pactos con México, Chile, Nueva Zelanda y Australia, progresar con India e Indonesia, y “reiniciar” las conversaciones con Mercosur, en un discurso con marcados mensajes para Pekín.

China ha estado alentando abiertamente a las empresas de uso intensivo de energía en Europa y en otros lugares para que reubiquen la totalidad o parte de su producción. Lo hacen con la promesa de energía barata, bajos costos laborales y un entorno regulatorio más indulgente. Al mismo tiempo, China subvenciona fuertemente su industria y restringe el acceso a su mercado para las empresas de la UE”, dijo.

Von der Leyen agregó que la UE tendrá que “trabajar y comerciar” con China en la transición del sistema productivo y aseguró que el bloque comunitario utilizará todas sus “herramientas para hacer frente a las prácticas desleales”.

“No dudaremos en abrir investigaciones si consideramos que nuestras compras u otros mercados están siendo distorsionados por tales subsidios” porque “el cambio climático necesita un enfoque global pero justo”, aseguró