Plan para pagar un millón de pesos a gestores de paz genera revuelo en el Congreso
Varios partidos políticos cuestionaron la propuesta del Gobierno Nacional pues consideran podría incentivar la delincuencia.
El plan del Gobierno Nacional para pagar un millón de pesos a jóvenes que salgan de la criminalidad y se conviertan en gestores de paz ha agitado nuevamente el debate alrededor de las políticas sociales impulsadas por el presidente Gustavo Petro.
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Desde el uribismo y otros sectores políticos cuestionaron fuertemente la posibilidad de establecer ese estímulo que consideran demasiado alto frente a las ayudas que son entregadas a la población joven que no ha estado relacionada con actividades ilegales.
Una de las mayores críticas es la senadora María Fernanda Cabal, quien calificó la medida como “mal ejemplo” para la juventud colombiana.
“Premiar delincuentes cuando hay tantos jóvenes honestos, trabajadores y pacíficos sin poder conseguir un empleo, es un pésimo ejemplo”, indicó.
Sin embargo, desde la coalición de partidos que apoyan al Gobierno se produjeron mensajes de respaldo a la iniciativa, pues consideran es necesaria para garantizar que los jóvenes vulnerables de las regiones más apartadas del país puedan tener la oportunidad de abandonar la delincuencia.
Según el presidente Gustavo Petro, la meta es tener al menos 100.000, lo que significaría un costo anual de más de un billón de pesos, sumado a otros programas educativos y de oportunidades laborales para garantizar su permanencia en la legalidad.