JEP deja en firme medidas cautelares sobre colección “Voces” del Centro de Memoria
La magistratura encontró que los riesgos bajo la pasada administración de Darío Acevedo fueron claramente evidenciados y se trató de invisibilizar esa pieza construida previamente con las víctimas.
La Sección de Apelación de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) dejó en firme la prórroga por noventa días hábiles de las medidas cautelares sobre la colección “Voces para transformar a Colombia”, objeto de protección debido a denuncias de alteración a relatos de las víctimas durante la administración de Darío Acevedo.
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Los magistrados señalaron que la decisión de primera instancia fue acertada al encontrar que sin fundamento o explicación técnica, más allá de un capricho de Acevedo y su equipo, se buscó suprimir o convertir a la colección “Voces” en una muestra cultural más, cuando previamente se había construido y definido como el guión del Museo de Memoria (el cual por varias demoras sería entregado completo solamente en 2025).
“En últimas, ni más ni menos, el cambio desdibuja los consensos alcanzados (producto de la participación) y retrotrae el asunto a las discusiones o deliberaciones iniciales relacionadas con la exhibición misma de la colección y sus itinerancias, en franca negación de su significado simbólico y su alcance reparador o sanador”, sentenció la Sección.
Asimismo, dieron como suficientes para acreditar el riesgo los testimonios de exfuncionarios sobre el retiro unilateral de un mural sobre los “falsos positivos” y un afiche de victimizaciones a la Unión Patriótica por parte de la dirección de Acevedo.
“...el CNMH, como lo ha hecho sostenidamente a lo largo de este trámite, mantiene su particular posición sobre la colección VTC, sin que hubiere desplegado acciones dirigidas, de manera inequívoca y real, a remediar las alteraciones y, por ende, a retornar la exposición a su estado original, tampoco logra desvirtuar que las modificaciones inconsultas y unilaterales”, indicó.
Finalmente criticaron duramente a la antigua administración, señalando que es inadmisible que propusiera como solución el almacenamiento de esa colección “en una bodega” catalogando lo anterior como una “forma de invisibilizar a las víctimas y de negarle a la exposición protegida su indiscutible vocación reparadora”.