Fiscalía abrió tres investigaciones por racismo y abuso sexual en Paya, Boyacá
La profesora Kerlin Sugey Murillo Mena denunció que sus dos hijos fueron golpeados, violentados y abusados por su color de piel en Paya, Boyacá.
Bunker de la Fiscalía General de la Nación. Foto: Colprensa.(Colprensa)
La Fiscalía General de la Nación le confirmó en primicia a W Radio que, se abrieron tres investigaciones por los delitos de racismo, discriminación y abuso sexual, por los hechos que se habrían presentado en el municipio de Paya, en Boyacá, donde dos menores y su mamá, al parecer, fueron atacados por su color de piel.
Kerlin Sugey Murillo Mena, oriunda del Chocó, denunció que al llegar al municipio de Paya, Boyacá, tuvo que soportar racismo, matoneo y que sus dos hijos al parecer también fueron abusados sexualmente.
Las investigaciones de la Fiscalía General están divididas dos por los casos de presuntos abusos sexuales y la otra por discriminación y racismo, sobre hechos ocurridos en junio de 2021.
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“Los presuntos delitos sexuales se habrían cometido a comienzos de 2022. Se pudo establecer que uno de los menores tenía 13 años para el momento de los hechos, razón por la cual el caso fue remitido a la Comisaría de Familia”, mencionó una fuente de la Fiscalía sobre este caso.
Debido a la gravedad de lo ocurrido, la Fiscalía General de la Nación conformó una mesa de tareas conjuntas entre Sijin de la Policía Nacional y el Cuerpo Técnico de Investigación CTI, que se encargarán de avanzar en la investigación para ayudar a esclarecer los hechos.
En diálogo con W Fin de Semana, la docente de inglés Kerlin Sugey Murillo Mena, explicó que fue lo que ocurrió en ese municipio de Boyacá.
“Me nombraron para prestar mis servicios en Paya, en el corregimiento de Morcote, en la Institución Educativa El Rosario. Cuando incursioné en la comunidad indígena, fuimos bien acogidos, pero cuando se levantó las medidas de la emergencia sanitaria nos vemos obligados a la presencialidad y allí no les caí bien ni a mis compañeros ni a mi jefe, por ser negra afrodescendiente”, dijo.
También señaló que sufrió acoso laboral y que los ataques de discriminación no cesaron frente a sus estudiantes, solo por su color de piel.
“El rector le decía a los estudiantes que nos les hiciera caso ni se acercaran a esos micos”, contó
También dijo que cuando empezaron a presentarse las agresiones contra sus dos hijos, tuvo que denunciar los casos de racismo y discriminación en la inspección de Policía de Morcote.
“Posteriormente me tocó denunciar ante la Comisaria de Familia y la Personería porque estaban agrediendo a mis hijos los mismos estudiantes de básica primaria”, afirmó.
Sin embargo, los ataques no sólo fueron verbales sino también sexuales contra sus hijos.
“Me tocaba llevar constantemente los niños a centros de salud donde eran atendidos, ante tanta situación, la médica tuvo que activar la ruta de atención integral para caso de bullying, violencia de género y sexual porque la institución hacía caso omiso a todo lo que estaba manifestando de forma verbal y por escrito”, afirmó.
