Así fue el debate de moción de censura a la MinMinas y así van las cuentas

La ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, enfrentó el primer debate de moción de censura contra un funcionario del Gobierno de Gustavo Petro. Sin embargo, la historia no termina ahí y Vélez tendrá que esperar a la decisión de la Plenaria de la Cámara de Representantes del próximo martes para que se defina si continúa o no en el cargo.

De momento, tiene el apoyo mayoritario, pero solo el 6 de diciembre, cuando se someta a votación la moción, se sabrá si logra mantenerse como jefe de la cartera minero-energética, en medio de las críticas y preocupaciones que han expresado los partidos Centro Democrático y Cambio Radical frente a su gestión.

El debate, que duró cerca de 10 horas, arrancó con las intervenciones de seis de los citantes, que estuvieron interrumpidas constantemente por el ruido en el recinto y las frecuentes peticiones de uso de la palabra de representantes para solicitar mociones de orden, que llevaron a que el presidente de la corporación, David Racero, retirara a todos los asesores del Salón Elíptico.

El primero en intervenir fue el representante uribista Oscar Villamizar, quien planteó una supuesta usurpación de funciones del Congreso por parte de la ministra, al proponer cerrar la puerta a la exploración y explotación de petróleo y gas.

“El artículo 150 de la Constitución, dice que la Ley determinará las condiciones para la explotación de los recursos naturales no renovables; la ley, no la ministra de Minas. Hasta donde tengo entendido, ministra, dentro de sus funciones no está legislar. Esas son las funciones que le da al Congreso de la República. ¿No les gusta lo que existe en este momento? No lo pueden dejar de aplicar. Vengan al Congreso a hacer el debate, que este Congreso debata y tome la decisión de si quiere exploración o explotación”, afirmó.

El momento más tensionante del debate lo protagonizó la representante Carolina Arbeláez, de Cambio Radical, quien reveló un contrato suscrito por Ecopetrol para importar gas de Venezuela.

“Toda esta crisis y este decrecimiento al que nos quiere llevar la ministra es porque tienen un negocio cocinado con Venezuela, fíjense ustedes”, precisó.

Sobre esa acusación hubo respuesta del Gobierno. El propio Ministerio de Minas y Energía señaló que se trata de un contrato que viene desde la administración del expresidente Álvaro Uribe.

En cuanto a la defensa de la gestión de Vélez, el Pacto Histórico cuestionó si el debate se promueve por la condición de mujer de la ministra, a quien consideran idónea para el cargo.

Otros partidos de gobierno, como el Conservador, también respaldaron a la funcionaria. El representante Wadith Manzur, por ejemplo, afirmó que, si bien hay declaraciones que preocupan de la ministra, “hay que ver los hechos y no las palabras” y que, hasta ahora, el Gobierno no ha afectado contratos ni políticas que puedan comprometer la seguridad energética del país.

La ministra estuvo acompañada por varios integrantes del gabinete que hicieron presencia en la sesión, entre ellos el ministro del Interior, Alfonso Prada; la de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, y la de TIC, Sandra Urrutia.

Vélez fue la última en hablar. En su intervención ratificó la necesidad de avanzar en la transición minero energética, aunque señaló que el tema será “seguro y gradual”.

También habló del estado de los contratos que han sido suscritos hasta el momento para la exploración y explotación de hidrocarburos. Reveló que, según la información más actualizada, actualmente hay 381 contratos vigentes, de los cuales 118 están en etapa de exploración. Además 35 están suspendidos y 32 “tienen oportunidad exploratoria”.

Las cuentas

Se da por descontado que en la votación de la moción los 18 representantes de Cambio Radical y los 15 del Centro Democrático votarán para pedir su salida del cargo, mientras que hay otros partidos que, aunque han manifestado críticas, la respaldarían.

Además del Pacto Histórico, como coalición de gobierno, otras colectividades oficialistas como el Partido Liberal, que pone 33 votos en esa corporación, los conservadores, con 27 curules, y La U con 16, apoyarían que Vélez siga frente a la cartera de Minas y Energía. Lo propio ocurriría con Alianza Verde, que tiene 15 representantes, con lo cual la ministra tendría ya a alrededor de 119, de los 188 congresistas que integran la Cámara de su lado, los suficientes para seguir en el cargo.

Por ahora la ministra tiene el respaldo de prácticamente todos los partidos. Las bancadas empezarán a reunirse en los próximos días para tomar una decisión unificada para el próximo martes, cuando llegará el momento de la verdad y se someterá a votación la moción.