La mina de carbón que se convirtió en el lago artificial más grande de España

Después de tres décadas extrayendo lignito a cielo abierto la mina dejó de funcionar en 2007. Cinco años después, en 2012, se inauguró el proyecto que se convirtió en uno de los lagos más grandes de España, que anualmente acoge diferentes eventos deportivos nacionales, turistas e impulsa el empleo de la zona.

En diálogo con Sigue La W, el ingeniero de minas José Antonio Menéndez, explicó el proceso de transformación de la mina en uno de los sitios turísticos más destacados de la Coruña y que hoy es conocido como el Lago Meirama.

Menéndez fue el último director de la mina mientras estuvo en funcionamiento y fue testigo directo de la transformación de la zona.

Según el ingeniero, el principal obstáculo que tuvo el proyecto en sus inicios fue conseguir las autorizaciones para desviar el cauce de un río que pasa muy cerca del hueco minero.

“La explotación del yacimiento finalizó en 2007, pero en 1999 se iniciaron los estudios para poder llevar a cabo la creación del lago, es una zona con muchísima precipitación y había que hacer algo para integrarlo al ecosistema natural”.

Frente al riesgo de residuos o partículas contaminantes en el lago después de años de explotación minera, el ingeniero manifestó que “Si se hace bien y se cuenta con los medios para hacerlos correctamente no hay ningún tipo de problema, el 95% del volumen de agua tiene calidad de potable”.

“Actualmente vamos con nuestras familias y observamos que crece la vegetación y está colonizado por las especies del territorio, todo fue progresivo y de manera completamente natural”, afirmó.

El proyecto de rehabilitación de la mina Meirama ha contado con una inversión de 60 millones de euros, los cuales han servido para rehabilitar 730 hectáreas de las 1.000 que se utilizaban para la explotación minera.