JEP: sargento Jaime Coral acepta imputación por falsos positivos en Dabeiba
En el documento conocido por La W, reiteró sus señalamientos hacia altos mandos del Batallón Contraguerrillas 79 y la Brigada Móvil 11 como el coronel Jorge Alberto Amor, también imputado por esos crímenes.
La W conoció en primicia el documento que remitió el sargento Jaime Coral Trujillo en el cual aceptó responsabilidad ante la JEP en calidad de uno de los máximos responsables que fueron imputados por falsos positivos en el caso Dabeiba (Antioquia), y en el cual pidió perdón por los crímenes de guerra que cometió.
Coral Trujillo señaló en su escrito que en su condición de subcomandante de la compañía España del Batallón Contraguerrillas 79 en Dabeiba, participó en grado de coautor en el homicidio de 12 personas y como cómplice en 3 de esos asesinatos.
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“Reconozco mi responsabilidad por el aporte esencial dentro del patrón criminal, como máximo responsable, por haber utilizado mi grado de suboficial de más alto rango y antigüedad en la tropa que comandaba, para articular la comisión de estos hechos”, indica el documento conocido por W Radio.
Además, en el documento de reconocimiento de responsabilidad el sargento del Ejército resaltó que para la comisión de esos crímenes de guerra se contó con el conocimiento y la organización de sus comandantes en el batallón: el coronel Efraín Prada, y el mayor David Guzmán, así como el comandante de la Brigada Móvil 11 coronel Jorge Alberto Amor y el jefe de operaciones de esa brigada coronel José Dumar Hernández.
En el escrito, el suboficial en retiro también reafirmó la dignificación de las víctimas indicando que no murieron en combate alguno, que se desaparecieron sus documentos y cuerpos en cementerios como el de Carepa, que subieron los cuerpos de algunas víctimas en camiones de basura, y la colaboración y coordinación con paramilitares de la zona, así como la participación directa de comandantes como el mayor Guzmán en los homicidios.
“Nos llevan al lugar en donde está el Mayor GUZMAN RAMÍREZ DAVID allí nos hacen tender al piso a los 3, luego el Mayor GUZMAN le pone la trompetilla del fusil al señor y le dispara en la cabeza, el Soldado. Arcila Gonzáles Fredy comienza a vestirlo de camuflado y chaleca, a hacerle disparar el fusil AK 47, mejor dicho, a arreglar la escena, luego le dispara al cuerpo, para que parezca un combate”, detalló en el documento.
Así las cosas y tras todo lo anterior, el sargento Coral expresó su reconocimiento a los cargos de desaparición forzada, homicidio en persona protegida y asesinato como crimen de lesa humanidad, y señaló arrepentimiento.
“Honorables Magistrados, quiero decir, que no me encuentro orgulloso de lo que hice, que sé que mi actuar delictivo es y debe ser reprochado por toda la sociedad, por mi familia, por la justicia y por su puesto por las víctimas; que jamás creí que me iba a apartar de mis principios y obligaciones como ser humano y militar”, se lee en el documento.
Asimismo, en una dura crítica interna, el sargento Coral manifestó su reproche por “mi silencio, mi cobardía, mi actuación criminal, mi deseo de honrar y darle gusto a mis superiores, genero esta práctica inhumana, que ocasionó miles de muertes y millones de víctimas indirectas (...) y por ello quedo a disposición de señalar a todas las personas que como yo somos máximos responsables de estas conductas”.
Finalmente reconoció su responsabilidad también en la consumación de otros falsos positivos en otras zonas del país, por ejemplo, la comisión de 38 homicidios de este tipo cuando se desempeñó en el batallón Batalla de Boyacá en Pasto, crímenes perpetrados en los corregimientos de Sotomayor, Pizanda, Remolino y El Encano.
En el mismo sentido, el integrante del grupo de máximos responsables, de acuerdo con la JEP, se pronunció sobre el asesinato de tres víctimas cuando integró el Batallón de Infantería general Simón Bolívar entre 2002 y 2004 en las veredas Juracambita (2002) y vereda Sirazí, municipio de Páez (2004).