Al Oído: Nicolás Maduro, el garante no garante de la paz

Las cuentas claras y el chocolate espeso, dice la sabiduría popular. Muchos acompañamos al presidente Gustavo Petro en la búsqueda de la Paz, pero ¿Nicolás Maduro como garante de los diálogos con el ELN?

Una persona que es cuestionada por la Corte Penal Internacional, uno de los principales causantes de una de las peores crisis migratoria del mundo. La invitación de Colombia a Nicolás Maduro más que la búsqueda de un garante pareciera una necesidad por ayudar a legitimar en el mundo a quien ha cometido de acuerdo con entes internacionales violación de derechos humanos en su país.

Naciones Unidas ha denunciado en diferentes ocasiones “graves violaciones de derechos humanos” en Venezuela. Ha documentado cientos de homicidios, la violencia de las fuerzas de seguridad contra manifestantes, detenciones arbitrarias, torturas y la represión de las llamadas Operaciones para la Liberación del Pueblo (OPL). La ONU también advirtió de la impunidad de las autoridades.

Un garante que como dicen por ahí es cómo poner Un ratón a cuidar el queso, ya que no es nuevo ni ajeno que se conozca que el territorio venezolano ha sido país del refugio de cabecillas guerrilleros, tanto del ELN como de las disidencias de las Farc.

Acaso olvida el presidente Petro que más de 50 democracias, incluido Estados Unidos, y prácticamente todos los 28 miembros de la Unión Europea declararon a Maduro presidente ilegítimo.

Validar una dictadura en medio de tantas violaciones de derechos para ser garante de diálogos de paz es servir de soporte a quien tanto daño ha hecho. La paz total cerca de las manos de Maduro genera dudas, desconfianza y tristeza, incluso preguntas cómo habla de paz en Colombia mientras no hay democracia en Venezuela. ¿En serio presidente Petro un garante que es buscado por los EE.UU. por narcotráfico?

¿A qué Nicolás Maduro le creemos, al que será garante de los diálogos de paz o al que ataca opositores y a quienes marchen en contra de su dictadura?

Honestidad y contundencia, no nos quieran cambiar la historia, ni lavarle la cara a un dictador. Sí a la paz, pero ¿a qué Maduro le creemos, al que dice querer la paz o al que desde su accionar dinamita la estabilidad de los derechos humanos en Venezuela?

La frase y pronunciamiento de la semana:

“Iván Márquez y la llamada Segunda Marquetalia, ya tuvieron su oportunidad y fallaron. Solo les queda el sometimiento”: Humberto de la Calle

El senador expresó su punto de vista luego de conocerse que Márquez estaría vivo y con intenciones de unirse nuevamente a un diálogo de paz.