Condiciones de PTAR Salitre no son óptimas para su operación: EAAB
Cristina Arango, gerente de la EAAB, se pronunció a las denuncias por fallas recurrentes en PTAR Salitre. Responde Gloria Giraldo, gerente del consorcio encargado de las obras.
Bogotá
En diálogo con La W, la gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, EAAB, Cristina Arango y la gerente del consorcio encargado de las obras de la PTAR Salitre, Gloria Díaz, se pronunciaron sobre las denuncias del Distrito acerca de posibles irregularidades en el proyecto.
Según Arango, el proyecto tiene que ser entregado en su totalidad y sin deficiencias para poder continuar con la operación debido que, hasta la fecha, presenta hechos que afectan o ponen en riesgo su correcto funcionamiento.
La gerente del Acueducto agregó que, aunque el contrato que tiene la CAR con el consorcio está próximo a acabar, se han evidenciado serias dificultades. Según indicó, dichas dificultades están concentradas en equipos que no están funcionando y que son críticos para la operación, pues hay unos que nunca han funcionado y otros que presentan fallas recurrentes”.
“(Otro) tema es el centro de control: los equipos no están conectados y la operación es básicamente manual. No se han entregado los manuales de operación y mantenimiento de la planta, lo cual genera dificultades en la operación”, advirtió Arango.
La gerente de la EAAB aseguró que la sentencia del río Bogotá establece que es su entidad la que debe llevar a cabo la operación, a pesar de que la gerencia del proyecto no ha dado la aprobación de la planta porque “considera que no cumple con ciertos temas, pues por orden judicial a nosotros se nos obliga a operar antes que eso sucediera”.
Arango subrayó así que resulta fundamental que “entreguen una planta que cumpla con las condiciones de operatividad”.
Por su parte, Gloria Giraldo, gerente del consorcio encargado de las obras, aseguró que las declaraciones de Arango no son ciertas, pues indicó que en marzo solicitaron una medida cautelar y una inspección judicial debido a que había 300 equipos en riesgo de perder su garantía porque no se les hacía mantenimiento.
También aseguró: “Este proyecto fue estructurado y tiene unas fases de construcción. La primera obedece a las obras de ampliación de la PTAR, que se construyen para aumentar el caudal y tipo de tratamiento. Una vez la planta esté en condiciones, la empresa de Acueducto debe entrar a operar –no a recibir las instalaciones porque son de la CAR–como operador natural porque así está establecido”.
Giraldo precisó que, a partir de ese punto, el contratista procede a una etapa de asistencia en operación, que consiste en enseñarle a la empresa cómo se opera la planta.
“De manera simultánea, se hacen las obras correspondientes al empalme de la planta antigua con la nueva. Una vez es desviado el caudal, al mismo tiempo hay un periodo de corrección de defectos que es donde se evalúa qué equipos presentan deficiencias en operación y se procede a hacer los ajustes. Así está planeado y el Acueducto era el conocedor”, concluyó la gerente del consorcio.