Virtudes, defectos y anécdotas: hablan amigos cercanos de Petro y Rodolfo Hernández

Colombia

A pocos días de la segunda vuelta electoral, La W conversó con los amigos de los candidatos presidenciales para conocer una faceta distinta de cada uno.

Ernesto Olarte, amigo de Rodolfo Hernández, contó que lo conoció en el Colegio Santander de Bucaramanga, en 1961, donde se volvieron compañeros muy cercanos. Además, decidieron estudiar la misma carrera en la Universidad Nacional y, años después, trabajaron juntos.

Sobre la candidatura presidencial de Hernández, Olarte admitió que, siendo joven, no le vio “pinta de presidente”, aunque sí destacó su gran liderazgo: “A la hora del recreo se formaban los corrillos y alguien sobresalía: era Rodolfo”.

“Para mí su mayor defecto es que es impaciente, lo cual a veces lo lleva a explotar, pero esas explosiones no son permanentes, son de momento. Pero es una persona buena. Su mayor cualidad yo creo que es el afán y las ganas de ayudar al que necesita en la medida en que pueda”, dijo.

Jaime Gómez Camacho, amigo de Gustavo Petro, aseguró que lo conoció en 1980 cuando trabajaba en Zipaquirá: “Asistía a un evento que se produjo allí, que fue la toma del matadero de Zipaquirá donde se reclamaba sacar ese matadero del centro de la ciudad”.

En cuanto a sus virtudes y defectos, Gómez resaltó la disciplina y la introversión de Petro, así como destacó que “entiende de economía, política, sociología y derecho”.

“La mayor virtud de Gustavo es su disciplina con el estudio, con el conocimiento, con las ganas de verle a cada problema, cada dificultad, las diferentes aristas para buscarle soluciones, no es un hombre que se conforme con dar una respuesta y listo, sino que profundiza, estudia y averigua”, aseguró.