JEP autoriza la extradición del señalado principal narcotraficante de Tumaco
Tito Aldemar Ruano, ‘Don Ti’, es señalado de enviar a Estados Unidos más de 2.000 kilogramos de droga en lanchas rápidas.
La Sección de Revisión de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) autorizó la extradición de Tito Aldemar Ruano, alias ‘Don Ti’, señalado como el mayor narcotraficante de Tumaco, y quien era uno de los llamados “colados” en las listas de las Farc, el cual es requerido por una corte de Nueva York en Estados Unidos por envío de cocaína a ese país.
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De acuerdo con la determinación, los magistrados concluyeron dar luz verde al traslado del señalado narcotraficante teniendo como pruebas que le fue revocada su credencial de acreditado como supuesto guerrillero de las Farc, y que luego de un trabajo investigativo de la DEA, se le acusa de concertarse con otros miembros de esa industria criminal para enviar 2.000 kilos de cocaína a Centroamérica entre 2015 y 2016, la cual tenía como destino final Estados Unidos.
“...se asociaron de forma ilícita para distribuir miles de kilogramos de cocaína. Los acusados transportaban cargas de cocaína, en las que también invertían, desde la costa del Pacífico de Colombia hasta Guatemala. Luego, las drogas se vendían a traficantes de drogas (…) para su importación final a los Estados Unidos” señala el testimonio del agente John Shine, así como un testigo cooperador e interceptaciones.
Es más, el testigo trabajó directamente en los envíos de cocaína, por los cuales le pagaban según la DEA, sumas superiores a los 10.000 dólares por entrega exitosa, además se relata que en una ocasión hubo incluso un naufragio de una embarcación y en otras les incautaron las lanchas con los cargamentos.
Así las cosas, y luego de revisar todos los procesos penales en los que se encuentra inmerso en Colombia, los magistrados concluyeron que en ninguno de ellos se le califica como un integrante de las Farc, sino como el jefe de una empresa criminal dedicada al narcotráfico, la cual colaboraba monetariamente con las Farc, al ubicarse en zonas donde ese extinto grupo armado hacía presencia.
Es más, distintos testimonios de exintegrantes de la guerrilla calificaron a “Don Ti” como un posible miliciano que les ayudaba con ciertas necesidades, posición que para la JEP no permite acreditar con sustento que sí hacía parte de ese desmovilizado grupo armado, al contrario, al ser interrogado no sabía la estructura jerárquica de la guerrilla, su organización y mucho menos el himno.