Señales confusas de la Fiscalía a Angélica Monsalve

Colombia

La fiscal Angélica Monsalve, quien tuvo el valor de denunciar las presiones que recibió para que cambiara su decisión de imputar a tres miembros de la poderosa familia Ríos Velilla, ha recibido noticias agridulces de la Fiscalía General de la Nación.

Por un lado, el ente acusador decidió que el caso contra Carlos y Javier Ríos Velilla y su sobrino Felipe Ríos Londoño siga en manos de la fiscal Angélica Monsalve hasta la etapa de juicio.

Es decir, no habrá cambio de fiscal. Será ella la encargada de llevar los argumentos de acusación ante el juez de conocimiento.

Este es un respaldo importante a la funcionaria judicial que decidió la imputación a los señores Ríos Velilla por encontrar que, en su concepto, los tíos Ríos deben ir a juicio por ser presuntamente los reales propietarios de la empresa Citimovil que hizo parte de la licitación ganadora del millonario contrato del recaudo de Transmilenio, mientras era concejal, el sobrino Felipe Ríos, violando así los tres el régimen de inhabilidades e incompatibilidades, de acuerdo con la acusación.

Es especialmente significativa la decisión porque la fiscal recibió presiones del señor Rodrigo Noguera Calderón, rector magnífico de la Universidad Sergio Arboleda (sí, rector magnífico se llama el cargo o se llamaba). Noguera es cercano al fiscal general Francisco Barbosa.

Los oyentes de La W pudieron oír esas presiones a la fiscal, que mencionan como parte del lobby al exfiscal general Néstor Humberto Martínez y al zar de las basuras Alberto Ríos Velilla.

Cuando la fiscal Monsalve, delegada ante los jueces del circuito de Bogotá, rechazó la sugerencia de cambiar su decisión de imputar a los poderosos señores Ríos recibió una orden de traslado al Putumayo. Que ella considera un castigo a su independencia.

Bueno, aparentemente la noticia sobre estas presiones persuadió a la Fiscalía de mantener a la doctora Monsalve como acusadora en el caso de los Ríos Velilla.

La resolución la firma la vicefiscal Martha Mancera, en calidad de fiscal general encargada, quien señala en el documento que la fiscal Monsalve garantiza que exista un proceso recto y eficaz para impartir justicia en este caso.

Hasta ahí la noticia buena.

Lo malo es que, después de que se promulgara esa resolución, la Fiscalía emitió otra. Fue el viernes pasado, 27 de mayo, cuando todos estábamos concentrados en las elecciones del domingo.

En este caso el documento lo firma Astrid Torcoroma Rojas, directora administrativa de la Fiscalía General.

La resolución de 34 páginas responde un recurso legal que había interpuesto la fiscal Angélica Monsalve contra su traslado al Putumayo.

En la decisión, la directora administrativa ratifica la orden de traslado de la fiscal Monsalve al Putumayo y ordena que se haga efectivo tan pronto se aclaren las amenazas de muerte contra la fiscal.

En medio de esta situación escandalosa, la Dijín y la Fiscalía advirtieron que había un plan del Clan del Golfo para atentar contra la fiscal Monsalve.

Ella no tiene a su cargo ningún proceso que implique al Clan del Golfo, ni a ninguna otra organización narcotraficante, puesto que el despacho a su cargo solamente está investigando delitos de cuello blanco.

Por lo demás el Clan del Golfo, a través de las llamadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia, negó que ellos quisieran matar a la fiscal.

Resulta incomprensible que la Fiscalía por un lado ordene que la doctora Monsalve siga al frente de los casos de los señores Ríos en su etapa de juicio y por otro que reitere que la trasladará al Putumayo.

O la Fiscalía no se habla con la Fiscalía o quizás alguien poderoso sigue presionando para sacar a Angélica Monsalve del sonado caso.