El “millonario negocio” que saquea el tesoro ambiental de las Islas del Rosario

Colombia

Mientras el país fija su atención en los contratos de arrendamiento “a dedo” de las Islas del Rosario, La W identificó el millonario negocio que está saqueando el tesoro ambiental y cultural de las Islas del Rosario.

En el presente informe, revelaremos los nombres de algunos de los arrendatarios que se beneficiaron al recibir “a dedo” dichos contratos.

Entre esos se encuentra el ‘zar del contrabando’, que recibió dos contratos, en la isla que está a la venta y el lucrativo alquiler de casas privadas que triplican en una noche el valor de los arriendos mensuales.

Los millonarios arrendatarios

Según datos recopilados vía derecho de petición, ya que la información de los contratos no es pública, como debería ser, La W revela algunos nombres de los beneficiarios de la Agencia Nacional de Tierras, que recibieron el predio sin cumplir con los requisitos ambientales, ni la consulta previa de las comunidades como lo establecieron la Corte Constitucional y Consejo de Estado.

1. Además de la Isla Majayura, Alain Suaza, el Zar del Contrabando utilizaba la Isla Totumo de 8 mil metros cuadrados. Pagaba 1.700.000 mensualmente
2. Leonor Serrano de Camargo, ex gobernadora de Cundinamarca Estero del Canapote, de 1.700 metros cuadrados. Canon 1.700.000
3. José Vicente Mogollón - Ex ministro y empresario cartagenero. Fue Ministro de Medio Ambiente de Ernesto Samper – Isla Punta Brava, valor: 1.200.000.
4. Karen Hinds de Santodomingo, viuda de Luís Felipe Santodomingo, sobrino del magnate, Julio Mario Santodomingo. Isla Cocosolo, valor: 4.235.000.
5. Augusto Eduardo Robayo Ferro, Propietario de Kokorico, Isla la Perra de 2.700 metros cuadrados, valor: 2.250 mil pesos.
6. Alfredo Villaveces Pabón, empresario de entretenimiento, El Paraiso, una hectárea valor $1.579.000.
7. Inversiones Douer Mishaan S.en C. - Empresa de la familia de Pepe Douer, dueño de empresas textiles como Manufacturas Elliot (Pat Primo y Seven Seven) – Isla Capriccio – 5.500 metros cuadrados, canon: 1500.000
8. Andrés Jorge Lisocki Fryde, empresario Representante Legal de Inversiones Piamonte, inmobiliaria de Cali. El empresario aparece en la lista de donantes de la Campaña Santos Presidente, Isla Fiesta, canon: 220 mil pesos.
9. Berta Fajardo de Urrea, Relacionista Pública de la Fundación Santa Fe de Bogotá. Ex Directora del Jardín Botánico – Isla María Galante, una hectárea. Valor: 594.000.
10. Zurek Lequerica e Hijos LTDA - Es una empresa familiar de Enrique Zurek. Los Zurek son dueños de Industrial, una de las empresas industrailes más grandes de Cartagena, dedicada a la producción deneveras y congeladores. Enrique Zurek fue concejal, viceministro de Desarrollo, gerente de las empresas municipales de Cartagena y directivo de la Licorera y la Electrificadora de Bolívar, además de alcalde de Cartagena. – Isla Punta de Las Mantas – Contrato 019-15.4.700 metros cuadrados, canon: $840.000
11. Amaury Covo -Vicepresidente de Operaciones Norte y Latinoamérica Grupo Ajover-Darnel – Isla Risa – Contrato 034-15, 2 mil metros cuadrados, $2.400.000
12. George Zaher Jaar, Gerente de Unibol, empresa barranquillera de productos de papel y de cartòn. – Isla Poligamia – Contrato 020-15. 5.300 metros cuadrados
13. Inversiones Inalbos S en C - Es una sociedad de Enrique Alvarado Baños y Magdalena Boshell Samper (pintora, conocida como Tutúa Boshell). Alvarado y su hijo Camilo son representantes legales y accionistas de la constructora Milenium Plaza, de Bogotá, que entre otras obras hizo Alamos Diverplaza. – Isla Única – Contrato 009-16.

Se vende Isla de los Colombianos

La W conoció por información de los mismos habitantes de las islas, que se encuentra a la venta Isla Samoa.

Al tratarse de baldíos reservados de la Nación, resulta extraño que dentro de Islas del Rosario se esté comercializando entre privados una casa de playa. Constatamos que el predio denominado Isla Samoa se encuentra arrendado por la Agencia Nacional de Tierras por un canon de 2 millones de pesos, pero su arrendatario la vende en alrededor 6.000 millones de pesos.

Las características de la casa son:

Isla Samoa:

• Planta eléctrica
• Casa vigilante
• Cocina independiente
• Cuarto util
• 2 baños social exterior
• Cuarto de maquinas
• Muelle en L
• 4 habitaciones
• 4 baños
• Ducha exterior
• 2 terrazas
• Directv
• Aire acondicionado
• Metraje 3.500mtros

» Valor: $6.500.000.000 (Seis mil quinientos millones de pesos)

» Arriendo: $ 2.500.000 (Dos millones quinientos mil pesos aproximadamente)

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Según fuentes de la Agencia Nacional de Tierras, quien se beneficiaría de esta millonaria venta de una vivienda construida sobre terrenos que nos pertenecen a los colombianos sería Mayron Adalberto Vergel.

El rentable subarriendo

A la entrega “a dedo” de estos contratos de arriendo de las Islas del Rosario, con cánones irrisorios, La W constató que varias casas de las islas están siendo subarrendadas.

Esto, a pesar de tener la prohibición expresa en los contratos y que, aunque aparecen publicados en las plataformas como Airbnb, la Agencia Nacional de Tierras no ha hecho el debido seguimiento, como tampoco ocurre en lo ambiental, sobre estos contratos que darían una causal de terminación del contrato.

Encontramos las siguientes ofertas de estadía de alquiler de casas, construidas sobre baldíos de los colombianos que no reciben beneficio alguno de este lucrativo negocio:

Casa de playa ubicada en Isla Grande:

Según el portal Colombia Rents el valor de la noche es de:

• $7.500.000 COP por noche (temporada baja)
• $10.500.000 COP por noche (temporada alta)

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Chalé en Isla Gigi:

• Valor noche: 4.800.000 para 12 huéspedes

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¿Y los derechos ambientales de los colombianos y las comunidades étnicas qué?

La W consultó expertos constitucionalistas sobre este asunto, quienes precisaron que celebrar contratos por parte de la Agencia Nacional de Tierras de arrendamiento “a dedo”, sin solicitar previamente las determinantes ambientales a las autoridades competentes y otorgar permisos para construir o hacer adecuaciones en los predios sin exigir la autorización pertinente vulnera y afecta los derechos ambientales y los ecosistemas presentes de las islas de todos los colombianos.

Igualmente, el adelantar acciones por parte de la Agencia Nacional de Tierras sin garantizar el derecho a la consulta previa de las comunidades étnicas de las islas vulnera no solo ese derecho fundamental, sino todos los demás derechos ligados al mismo.

Como identidad cultural, supervivencia, calidad de vida y mínimo vital, entre otros.