Regiones

Concejal incentiva la “defensa propia” o “paloterapia” cuando haya atracos en Bucaramanga

El concejal y también pastor Jaime Beltrán dice que esto que propone se hace por la falta de gobernabilidad y efecto de la justicia en Bucaramanga y el país.

Concejal Jaime Beltrán / Twitter del político

Por no responder de manera efectiva por parte de las autoridades al momento de un atraco, en sus diferentes modalidades, el concejal de Bucaramanga, Jaime Beltrán, explicó que invita a la gente que por ausencia de gobernabilidad, la misma ciudadanía se una al momento de un hurto, es decir, que haya una reacción en defensa propia por parte de la comunidad para que el delincuente le tenga miedo a las víctimas.

Aclaró que lo que es conocido como "paloterapia" o "linchamiento" no es una propuesta, solo que como ciudadano invita a que se reaccione a una agresión de un delincuente.

Le puede interesar:

Varios trinos de rechazo y ataque se han originado tras esta invitación del concejal, por ser pastor, y supuestamente incentivar a la violencia, a lo que él le dijo a La W que fue víctima de hurto al montar cicla, y junto con su familia tuvo que neutralizar al delincuente para recuperar sus pertenencias de valor, esto mientras esperaba que llegara alguna autoridad a atender el caso.

“Si no tenemos policía y autoridad en Bucaramanga, pues unámonos y nos defendemos, ahí es donde sale la famosa paloterapia, hay una inconformidad de la ciudadanía de decir, no nos vamos a dejar robar, ni que nos sigan dañando el buen vivir, estamos cansados que nos roben en cada esquina, unámonos, defendámonos y si es necesario, con nuestras propias manos vamos a defendernos de las personas que quieren hacer daño, es ausencia de gobernabilidad. Que la misma ciudadanía se una y no dejen solo al otro”, puntualizó Beltrán.

En cuanto al tema de seguridad, el concejal dijo que hay siete mil millones que están en los bancos y no se han usado para la seguridad y vigilancia de la ciudad, también, resaltó que hay un contrato de alto valor para el alumbrado público que no se ve invertido en la capital de Santander, ya que la mitad del municipio está a oscuras.