Opiniones divididas en el Magdalena luego de conocerse la despenalización del aborto
Defensores de derechos de la mujer y la iglesia católica se pronunciaron sobre el tema.
Mujer embarazada/ Getty Images
Luego de conocerse la decisión de la Corte Constitucional que despenalizó totalmente el aborto hasta la semana 24 de gestación, surgieron opiniones a favor y en contra de esta medida, Santa Marta y el Magdalena no son la excepción.
Para la defensora de los derechos de la mujer en el Magdalena, Jennifer del Toro, el aborto no es una decisión feliz para ninguna mujer teniendo en cuenta las circunstancias que la obligan a ello, el proceso de aceptación de una decisión como esta, “desde el 2006 hasta la fecha se ha dicho que Colombia tiene una obligación con los comités que defienden los derechos humanos de las mujeres, en ese sentido han recomendado la despenalización del aborto, porque se entiende que es un tema de salud pública que afecta la salud sexual y reproductiva de las mujeres que se impone como una carga para las mujeres que no desean ser madres; hay unas ideas que siguen teniendo injerencia en la vida pública. En Colombia se realizan más de 400 mil abortos cada año, donde el 90% se hace en la clandestinidad”, dijo Jennifer del Toro.
Afirma además que, lo que se debe celebrar es cuando exista una verdadera política de salud sexual y reproductiva integral que garantice a las mujeres colombianas, no quedar en situación de maternidad no deseada.
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Por su parte la iglesia católica se pronunció al respecto, a través de monseñor José Mario Bacci, obispo de la Diócesis de Santa Marta, quien aseguró sentir tristeza sobre esta decisión, “no hablemos de los creyentes ni las motivaciones religiosas, hablemos del punto de vista humano es una decisión triste e indigna, Colombia ahora es el país en América Latina que tiene el plazo más amplio, más generoso de periodo dentro del cual en el embarazo es posible abortar; insisto la iglesia levanta su voz no porque se trate de un tema religioso, sino porque es un tema que hiere la dignidad de la persona humana”.
Afirmó además que, así como en otros lugares la iglesia ha levantado su voz para exigir por los derechos de las personas; así lo hace en esta ocasión.
