“¿Qué pasa con el Estado?”: habitantes de Arauca tras más de 3.000 personas confinadas y 24 asesinatos
Al menos 22 personas muertas es el balance que dejan hasta este lunes los enfrentamientos entre las disidencias de las Farc y el Eln en Arauca.
Arauca
Más de 20 personas muertas es el balance que dejan hasta este 3 de enero los enfrentamientos entre disidencias de las Farc y el ELN en el departamento de Arauca. A su vez, existen al menos 3.000 personas que se encuentran en riesgo de desplazamiento.
La Defensoría del Pueblo se ha pronunciado a propósito de esta situación, expresando su profunda preocupación frente a lo que está sucediendo, pues además de los homicidios se han reportado “amenazas, retenciones ilegales, desplazamientos masivos y riesgo de desplazamiento forzado en municipios de frontera, específicamente en Tame, Fortul, Saravena y Arauquita”.
Por esta razón, la entidad instó a las autoridades regionales a activar las instancias pertinentes para atender y proteger a la población civil.
Le puede interesar:
Bajo esta misma línea se pronunció la Diócesis de Arauca, quien pidió que se “deje a la población civil por fuera de las confrontaciones y hostilidades, aplicándose en todo el Derecho Internacional Humanitario” y solicitó a las autoridades que “verifiquen los hechos y se empeñen por proteger la vida e integridad de la población de los lugares en donde se estarían presentando las confrontaciones”.
Mayerly Briceño, líder social de Arauca, se pronunció en Sigue La W acerca de la preocupación por las más de 3.000 personas confinadas y los más de 20 asesinatos en las últimas 24 horas.
“Todo el mundo está encerrado en nuestro corregimiento, no se puede salir ni a comprar medicamentos (...) no tenemos una ruta de salida ni presencia del Estado, nunca la habido”, reclamó la lideresa.
Incluso, Briceño expuso que la población tiene suerte de poderse conectar y comunicarse, puesto que resulta realmente imposible movilizarse.
Además, hizo referencia a la situación de orden público en la región, que no es nueva: “En Arauca operan grupos ilegales, eso no es un secreto, el país entero lo sabe (...) aproximadamente 27 personas han sido asesinadas y el acceso a los cuerpos ha sido difícil. Todos tenemos miedo, pero decíamos: ¿vamos a repetir lo que vivíamos hace 13 años? Esa gente que nadie voltea a mirar, esos campesinos, son los que sufren”.
Así, la lideresa concluyó: “Solo pedimos que nos dejen vivir en paz. Aquí nunca hay presencia de la fuerza pública o del Estado”.