Los restos de Ricardo III, motivo de disputa en Inglaterra
La catedral de Leicester ha sido escogida como su lugar definitivo de descanso por haber sido encontrados sus restos en esa ciudad.
Los restos del rey Ricardo III, localizados el lunes tras 500 años de búsqueda, son motivo de disputa en Inglaterra, donde expertos y autoridades locales debaten sobre el lugar donde debe ser enterrado el soberano.
La catedral de Leicester ha sido escogida como su lugar definitivo de descanso por haber sido encontrados sus restos en esa ciudad e identificados mediante pruebas de ADN por científicos locales.
Pero la ciudad de York también aspira a recibir los restos de Ricardo III (1452-1485) pues fue el último monarca de la dinastía de York, mientras otros expertos señalan a la abadía de Westminster en Londres como el lugar adecuado, ya que cuando falleció era soberano reinante.
El equipo arqueológico de la Universidad de Leicester confirmó el pasado lunes que unos restos encontrados en otoño del año pasado pertenecían, "más allá de toda duda", a Ricardo III, el último monarca inglés fallecido en una batalla.
Sus restos fueron encontrados bajo un aparcamiento en el que en aquella época se encontraba una iglesia que las reseñas históricas señalan como la tumba del soberano, quien murió en la batalla de Bosworth Field en 1485, durante la Guerra de las Dos Rosas.
Desde el lunes los habitantes de York han reunido 11.000 firmas para reclamar los restos del monarca e incluso varios dirigentes municipales escribieron cartas a la reina Isabel II y al Ministerio de Justicia para que el soberano volviera a su "hogar espiritual".
No obstante, su catedral ha renunciado en favor de Leicester por considerar que, tras los meses de investigaciones, los habitantes de esa localidad han desarrollado un "sentimiento de pertenencia" hacia el monarca.
El Ministerio británico de Justicia zanjó hoy la cuestión en un comunicado que otorga la victoria a Leicester, al tener el permiso para exhumar los restos del monarca.
"La licencia fue concedida a la Universidad de Leicester hasta el 31 de agosto de 2014 así que hasta entonces podrá conservar los restos en el museo Jewry Wall o darles sepultura en la catedral de St. Martin o en cualquier terreno en el que esta acción pueda practicarse", indicó el Ministerio.
Las autoridades de York han anunciado que continúan adelante con su plan de contactar con el Ministerio y la reina de Inglaterra para que "reconsideren su opinión teniendo en cuenta a la gente de York".
Ricardo III, duque de Gloucester, sucedió en el trono en 1483 a su hermano Eduardo IV, cuyos hijos se probaron ilegítimos, y reinó durante dos años hasta su muerte en 1485.
Fue el último miembro de la casa de los York en el trono, a la que siguió la dinastía de los Tudor.
La catedral de Leicester ha sido escogida como su lugar definitivo de descanso por haber sido encontrados sus restos en esa ciudad e identificados mediante pruebas de ADN por científicos locales.
Pero la ciudad de York también aspira a recibir los restos de Ricardo III (1452-1485) pues fue el último monarca de la dinastía de York, mientras otros expertos señalan a la abadía de Westminster en Londres como el lugar adecuado, ya que cuando falleció era soberano reinante.
El equipo arqueológico de la Universidad de Leicester confirmó el pasado lunes que unos restos encontrados en otoño del año pasado pertenecían, "más allá de toda duda", a Ricardo III, el último monarca inglés fallecido en una batalla.
Sus restos fueron encontrados bajo un aparcamiento en el que en aquella época se encontraba una iglesia que las reseñas históricas señalan como la tumba del soberano, quien murió en la batalla de Bosworth Field en 1485, durante la Guerra de las Dos Rosas.
Desde el lunes los habitantes de York han reunido 11.000 firmas para reclamar los restos del monarca e incluso varios dirigentes municipales escribieron cartas a la reina Isabel II y al Ministerio de Justicia para que el soberano volviera a su "hogar espiritual".
No obstante, su catedral ha renunciado en favor de Leicester por considerar que, tras los meses de investigaciones, los habitantes de esa localidad han desarrollado un "sentimiento de pertenencia" hacia el monarca.
El Ministerio británico de Justicia zanjó hoy la cuestión en un comunicado que otorga la victoria a Leicester, al tener el permiso para exhumar los restos del monarca.
"La licencia fue concedida a la Universidad de Leicester hasta el 31 de agosto de 2014 así que hasta entonces podrá conservar los restos en el museo Jewry Wall o darles sepultura en la catedral de St. Martin o en cualquier terreno en el que esta acción pueda practicarse", indicó el Ministerio.
Las autoridades de York han anunciado que continúan adelante con su plan de contactar con el Ministerio y la reina de Inglaterra para que "reconsideren su opinión teniendo en cuenta a la gente de York".
Ricardo III, duque de Gloucester, sucedió en el trono en 1483 a su hermano Eduardo IV, cuyos hijos se probaron ilegítimos, y reinó durante dos años hasta su muerte en 1485.
Fue el último miembro de la casa de los York en el trono, a la que siguió la dinastía de los Tudor.