Condenan al Ministerio de Defensa por fumigación indiscriminada con glifosato
Los dueños de los predios afectados aseguraron que la fumigación con los herbicidas químicos causó daños graves e irremediables a cultivo de caucho, yuca y al bosque virgen.
El Consejo de Estado le ordenó al Ministerio de la Defensa y a la Policía Nacional poner en marcha un proyecto de reforestación con especies maderables propias del departamento del Caquetá.
Así se desprende de una decisión adoptada por la máxima corporación de lo contencioso administrativo al condenar a la Nación por los daños causados a dos predios rurales ubicados en Belén de los Andaquíes (Caquetá) por la fumigación con glifosato que adelantó la Policía Antinarcóticos en abril de 1999 para la destrucción de cultivos ilícitos.
Los dueños de los predios afectados aseguraron que la fumigación con los herbicidas químicos causó daños graves e irremediables a cultivo de caucho, yuca, al pasto y al bosque virgen o de reserva.
Con ponencia de la magistrada Stella Conto Díaz del Castillo, la sección tercera del Consejo de Estado indicó que a la Nación no le está permitido proceder a fumigar un cultivo sin haberlo identificado previamente como ilícito.
“Aunque la sala acepta la situación de orden público como una fuerza mayor que impide la visita al predio, lo cierto es que la norma exige identificar tanto los linderos de los predios como los cultivos ilícitos, tarea que con los medios tecnológicos con los que ahora se cuenta puede cumplirse sin la necesidad de hacer presencia física en los predios, por ejemplo, con imágenes satelitales o tomadas desde aeronaves”, indica la sentencia.
El Consejo de Estado le da un año de plazo al ministerio y a la Policía para que ejecuten con cargo a su patrimonio y con apoyo técnico de la corporación para el desarrollo sostenible del sur de la Amazonía un proyecto de reforestación con especies maderables propias de la región como el cedro, achapo, nogal, balso, carbonero, ahumado, etc, con el objetivo de obtener una reparación integral de los bosques afectados.
Así se desprende de una decisión adoptada por la máxima corporación de lo contencioso administrativo al condenar a la Nación por los daños causados a dos predios rurales ubicados en Belén de los Andaquíes (Caquetá) por la fumigación con glifosato que adelantó la Policía Antinarcóticos en abril de 1999 para la destrucción de cultivos ilícitos.
Los dueños de los predios afectados aseguraron que la fumigación con los herbicidas químicos causó daños graves e irremediables a cultivo de caucho, yuca, al pasto y al bosque virgen o de reserva.
Con ponencia de la magistrada Stella Conto Díaz del Castillo, la sección tercera del Consejo de Estado indicó que a la Nación no le está permitido proceder a fumigar un cultivo sin haberlo identificado previamente como ilícito.
“Aunque la sala acepta la situación de orden público como una fuerza mayor que impide la visita al predio, lo cierto es que la norma exige identificar tanto los linderos de los predios como los cultivos ilícitos, tarea que con los medios tecnológicos con los que ahora se cuenta puede cumplirse sin la necesidad de hacer presencia física en los predios, por ejemplo, con imágenes satelitales o tomadas desde aeronaves”, indica la sentencia.
El Consejo de Estado le da un año de plazo al ministerio y a la Policía para que ejecuten con cargo a su patrimonio y con apoyo técnico de la corporación para el desarrollo sostenible del sur de la Amazonía un proyecto de reforestación con especies maderables propias de la región como el cedro, achapo, nogal, balso, carbonero, ahumado, etc, con el objetivo de obtener una reparación integral de los bosques afectados.