Evo Morales lamenta la muerte del exmandatario peruano Alan García
El presidente de Bolivia, Evo Morales, lamentó este miércoles la muerte del exmandatario peruano Alan García, quien se disparó en la cabeza cuando iba a ser detenido.
"Conmovidos con la muerte del expresidente de Perú, Alan García. Nos sumamos al dolor de la familia y enviamos nuestras sinceras condolencias. Paz en su tumba", escribió el mandatario boliviano en su cuenta oficial de Twitter.
El presidente de Perú, Martin Vizcarra, y fuentes del partido Aprista, del que era parte el expresidente García, confirmaron este miércoles la muerte del dos veces gobernante del país vecino (1985-1990 y 2006-2011).
García murió mientras era operado en el hospital Casimiro Ulloa de Lima, a donde fue trasladado de urgencia por agentes de la Policía que habían llegado a su casa para detenerlo.
En tanto, el presidente de la Cámara de Diputados de Bolivia, el oficialista Víctor Borda, también lamentó este "hecho lamentable", pero que "demuestra que varios exmandatarios latinoamericanos lamentablemente están involucrados".
En declaraciones a los medios en La Paz, Borda pidió celeridad en las investigaciones en Bolivia sobre supuestas vinculaciones de exmandatarios y exministros bolivianos con el caso Odebrecht.
"Debe haber una exhortación para que el Ministerio Público, la Justicia boliviana, pueda establecer la verdad histórica del caso Odebrecht que también tiene raíces de corrupción en Bolivia", declaró.
Por su parte, el candidato opositor a la Presidencia de Bolivia por la alianza Comunidad Ciudadana, el expresidente boliviano Carlos Mesa, también expresó su conmoción por la muerte del exmandatario peruano, a quien tildó como "una de las figuras más relevantes de la política" en la región.
"Conmocionado por la trágica muerte del expresidente Alan García. Más allá de cualquier valoración circunstancial, una de las figuras más relevantes de la política latinoamericana contemporánea. Mis sentidas condolencias", manifestó Mesa en Twitter.
Alan García era investigado por la Fiscalía por sobornos que la constructora Odebrecht pagó a altos funcionarios de su segundo Gobierno para obtener la adjudicación para construir la Línea 1 del Metro de Lima, cuyos indicios de los beneficiarios apuntaban directamente al expresidente.
Odebrecht es considerado uno de los mayores casos de corrupción de la historia de Brasil, con investigaciones también en otros países como Perú y Bolivia.
Un juzgado anticorrupción de Bolivia ordenó el pasado febrero el encarcelamiento de dos procesados en el país en los casos de corrupción Odebrecht y Lava Jato, después de que la Asamblea Legislativa boliviana remitiera a la Fiscalía un informe de presuntas irregularidades.
El Parlamento boliviano incluyó a ocho miembros de gobiernos del país en la década de 2000 como denunciados y sospechosos en estos casos, por supuestos sobornos e irregularidades como sobreprecios en adjudicaciones de obras.