Ronaldo pagará 360.000 euros por evitar pagar una pena de cárcel por delitos fiscales
El futbolista había sido condenado a una pena de 23 meses y 30 días de prisión más una multa económica, pero llegó a un acuerdo con la fiscalía española.
Cristiano Ronaldo ha asegurado que está "todo perfecto" tras ser condenado hoy a 23 meses y 30 días de prisión -que no cumplirá- y a una multa de 18,8 millones de euros por fraude fiscal, el mismo día que el juicio contra su excompañero Xabi Alonso se ha suspendido por una cuestión de competencia.
Ambos jugadores han comparecido hoy en juicios celebrados en la Audiencia Provincial de Madrid acusados de varios delitos fiscales pero con la diferencia de que Ronaldo venía a ratificar el acuerdo alcanzado previamente con la Fiscalía para evitar el ingreso en prisión y Alonso a defender su inocencia ante el tribunal.
La única similitud entre ambos procedimientos ha sido el escaso tiempo que han durado las vistas (5 minutos Ronaldo y 10 Alonso) inversamente proporcional al número de periodistas y reporteros gráficos que desde primera hora de la mañana esperaban en el exterior de la Audiencia la llegada de ambos futbolistas.
Ronaldo habló, aunque muy poco. Habló lo justo en la Sala para manifestar con un "sí" que reconoce los hechos de que se le acusan, esto es los cuatro delitos fiscales cometidos entre 2010 y 2014 por los que eludió el pago de 5,7 millones de euros a Hacienda.
El juicio de Ronaldo era, por tanto, una mera formalidad para ratificar dicho acuerdo, por el que acepta una condena de 23 meses y 30 días de prisión y una multa de 18,8 millones de euros.
La sentencia, hecha pública hora y media después del juicio, condena a Cristiano como "autor criminalmente responsable" de cuatro delitos contra la Hacienda Pública.
Y "decreta la sustitución de las penas de prisión impuestas por una pena de multa" de 360.000 euros, que figuran dentro de la multa millonaria que ya ha consignado el jugador, que recoge también el dinero defraudado y los intereses de demora.
Es por ello que la expectación no era tanto por lo que iba a acontecer dentro sino fuera, especialmente después de que la Audiencia rechazara la petición de Cristiano para entrar por el parking y evitar el paseíllo ante las cámaras.
Pero hubo paseíllo. Y lo hizo cogido de la mano de su pareja Georgina Rodríguez. Primero cuando llegó a las 09:36 y luego cuando se marchó a las 10:24. En ambos casos igual de sonriente.
"Todo perfecto", ha dicho Ronaldo a su salida al ser preguntado sobre cómo había transcurrido el juicio con el que salda su cuenta con la justicia española. "Ya está, ya está", ha añadido.
La sentencia, basada en el acuerdo, considera probado que el jugador se aprovechó de una estructura societaria creada en 2008 a partir de una empresa pantalla en las Islas Vírgenes, de la que solo él era socio, que cedió sus derechos de imagen a otra en Irlanda, que sí se dedicó a su gestión y explotación.
"Todo ello sin que (la primera) desarrollara acción alguna tendente a dicha explotación, haciendo que la previa cesión a ésta fuera completamente innecesaria y solamente tenía como finalidad la interposición de una pantalla para ocultar a la Agencia Estatal de la Administración Tributaria de España la totalidad de los ingresos obtenidos" por esos derechos añade.
Así, "con la intención de obtener un beneficio fiscal ilícito" y "queriendo dar una apariencia de realidad a la estructura simulada anteriormente descrita", Ronaldo presentó en su declaración del IRPF de 2014 una rentas de fuente española entre 2011 y 2014 de 11,5 millones de euros, cuando las verdaderamente obtenidas fueron de más de 34 millones de euros, ya que tenía "obligación de declarar" la totalidad de las generadas en España.
Ronaldo calificó, además, los rendimientos obtenidos como derivados del capital mobiliario y no de actividades económicas "con la finalidad de evitar indebidamente la calificación como rentas obtenidas de fuente española", lo que "permitió al acusado disminuir considerablemente la base imponible".
El otro protagonista del día ha sido Xabi Alonso, pero el tribunal ha suspendido hoy el juicio contra el exfutbolista hasta decidir si es competente para juzgarle por tres delitos contra la Hacienda Pública en los ejercicios 2010, 2011 y 2012, hechos por los que la Fiscalía pide cinco años de prisión.
Al contrario que su excompañero sí que ha hecho declaraciones. "Sí tengo la convicción y la confianza en que he hecho todas las cosas bien, en que he colaborado desde el principio y en que nunca he ocultado nada, tengo que defenderme y confiar en la justicia. Por eso hasta aquí he llegado y voy a seguir hasta el final", ha dicho.
Tendrá que esperar a que el tribunal decida si su juicio será en la Audiencia Provincial o en un Juzgado de lo Penal.
Ronaldo y Alonso, compañeros durante años en el Real Madrid, ni se han cruzado ni se han visto, pese a estar en el mismo edificio.