El debate sobre el glifosato en Colombia entre Guillermo Rivera y Fernando Araujo
El ex ministro del interior del gobierno Santos y el senador por el centro democrático explicaron en La W sus posiciones sobre el glifosato en el país.
Fernando Araujo y Guillermo Rivera tienen posiciones divididas frente a la aspersión de glifosato para la erradicación de cultivos ilícitos en el país.
Por su parte, Guillermo Rivera dijo que “Ante la duda de una política de estado que pudiera afectar la salud de los colombianos o el medio ambiente, el estado debe abstenerse de tomar esa medida”. Mientras que Araujo sostuvo que: “Combatir el narcotráfico es importante para el país. No hay ninguna evidencia científica sobre si el glifosato es cancerígeno o no”. Agregó que en el país se consumen 10 millones de litros de glifosato al año y se aplica en todos los cultivos agropecuarios. “Es un instrumento supremamente eficiente”.
El ministro de defensa, Guillermo Botero, defiende el uso del glifosato, afirmando que no ha conocido mejor herbicida. Frente a este anuncio, Guillermo Rivera expresó que “Asperjar con glifosato no es la única manera de erradicar los cultivos ilícitos”. Mientras qua Araujo comparte la idea de Botero, y manifestó: “Que no se renuncie a un instrumento fundamental para erradicar el narcotráfico”.
La tesis del ex ministro del interior del gobierno Santos explica que no coincide la suspensión de glifosato con el incremento de cultivos ilícitos, no se puede decir que sea una coincidencia. “El incremento de los cultivos se debe al aumento de la demanda”. Por su parte, Araujo explicó que “Colombia no está perdiendo la lucha contra las drogas, Colombia abandonó esta lucha”.
Rivera aconsejó al gobierno actual aumentar los recursos para el programa de sustitución voluntaria. Además, explicó que “El glifosato tiene efecto globo, lo que si disminuye en un lugar, se aumenta en otro”.
Entre la relación del cáncer y el glifosato, Araujo dijo que durante el gobierno anterior murieron muchas personas por proteger esos cultivos. “Acá se habla del cáncer que produce el glifosato (…) “La realidad de Colombia es que el cáncer es el narcotráfico”.
Rivera mantiene la idea de que “El glifosato logra una erradicación rápida en las zonas de cultivo, pero no acaba el flagelo, porque lo que ocurre es que el flagelo se va trasladando y el área cultivada en coca va creciendo y con ello el impacto ambiental”. Explicó que hay que combinar estrategias para erradicar los cultivos ilícitos, la sustitución voluntaria está empezando a funcionar. “No estoy de acuerdo con la erradicación forzosa”.